Fueron siete allanamientos en simultánea los que hicieron las autoridades para capturar a los integrantes de una banda delincuencial que les cobraba a conductores de la ciudad de Pereira. Pero no solo esto, había toda una mafia que incluso les vendía documentos falsos a quienes tenían cuentas pendientes ante los organismos de tránsito.
“Generaban extorsión no solo para los operarios que usan el transporte informal, sino que cobraban cupos y también cobraban y utilizaban menores de edad. Hoy hay cinco capturados”, contó la secretaria de Gobierno de Pereira, Karen Zape.
Según las autoridades, los señalados cobraban una especie de ‘membresía’ de más de un millón de pesos para dejarlos trabajar y a través de redes sociales les avisaban cuando la Policía o Tránsito iba a hacer un control vial.
Además, pedían diario $10 mil, los sábados una tarifa especial de $25 mil y cada Año Nuevo un millón de pesos.
“El no pago de las exigencias implicaba que las víctimas no pudieran seguir trabajando”, según la coronel Alexandra Díaz Gómez, comandante de la Policía Metropolitana de Pereira.
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Líder de banda: "Papi, ellos mandaron a orillar como a tres carros ahí. Ahí mandaron a orillarlos"
Conductor: pero, ¿por qué?
Líder de banda: "Porque ustedes no las creen con esos grupos, boba, y ahí los mandaron a orilla"
Conductor: "No, marica, pero es que ese grupo…"
Líder de banda: "Yo le dije a más de uno, sí o sí, pa. Eso es como los $10.000, es obligatorio"
También señalan las autoridades que usaban a menores de edad para recolectar el dinero. Y a quienes no tuvieran licencia de conducción o antecedentes penales, les alquilaban cédulas y documentos falsos para poder pasar desapercibidos en los retenes de la Policía.
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Según la Secretaría de Gobierno de Pereira, “se encontró un número alto de cédulas falsas, alrededor de 180 cédulas fueron incautadas”.
Con seguimiento mediante llamadas telefónicas y con cámaras ocultas se pudo determinar quiénes eran los líderes de esta banda. Falta por capturar a más personas.