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En el Museo de Antioquia reposa el único mural que Fernando Botero pintó en Colombia

Se trata de Escena con jinete, un fresco que lleva el sello de una etapa inédita en la vida de Fernando Botero. Aunque antes estaba en un banco, la obra fue llevada a ese recinto de arte.

Mural Fernando Botero
Imagen: Noticias Caracol.

En el Museo de Antioquia permanece el único mural en Colombia del maestroFernando Botero, que falleció este viernes, 15 de septiembre de 2023. Esta escena no solo se roba la atención de las personas por su mensaje, sino por haber sobrevivido al olvido durante mucho tiempo.

En 2021, este único mural en Colombia del maestro Fernando Botero tocó las puertas del Museo de Antioquia. Desde entonces, Escena con jinete ha dejado boquiabierto a más de un visitante.

“Da cuenta de un momento importante del artista, es la última obra grande que hace antes de irse a vivir a Estados Unidos. Allí plantea una mirada sobre ciertos temas de la idiosincrasia del departamento en ese jinete, que es un conquistador”, indicó Camilo Castaño, curador del Museo de Antioquia.

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Según María del Rosario Escobar, directora del museo, la técnica con la que Fernando Botero realizó este fresco “es una en la que se pinta sobre una pared preparada para tal fin. Se hace con etapas, pero rápidamente es una técnica antigua utilizada, sobre todo, en el Renacimiento italiano”.

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El traslado desde el Banco Central Hipotecario de Medellín no fue fácil, pero tampoco imposible. El viaje no afectó al mural y luce intacto, como si no se hubiese pintado en 1960.

Los funcionarios del museo manifestaron que el traslado del fresco se realizó durante la pandemia del COVID-19. Aseguran que la obra podía ser movida, pues le pertenece al Estado y la pintura estaba en peligro de deterioro.

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Y como si fuera una señal del destino, varios niños llegaron a observar al mural, mismo que está inspirado en la infancia de Fernando Botero y los cuentos antioqueños.

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“Esa fue una pintura muy difícil de crear. Él no respetó las líneas que hizo y eso se admira mucho. Fernando Botero no expresó una vida de fama, sino de pinturas. No una vida de dinero, sino de pasión por pintar”, manifestaron los estudiantes.

Esta joya del arte del maestro Fernando Botero, por un tiempo, fue opacada por la transformación de Medellín, pero recobró vida desde hace algún tiempo. Aunque hace parte de toda la colección de trabajos del artista en la ciudad, es una pieza diferente, no solo en tamaño y técnica, es porque refleja su etapa más genuina.

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