En Buenaventura la educación batalla para hacerle frente a los violentos

Los colegios en Buenaventura son semilleros de niños que sueñan con servir a los demás. Noticias Caracol llegó al puerto y evidenció lo que docentes han hecho con cientos de jóvenes, entendiendo que la educación es clave para solucionar los problemas sociales.

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En la escuela normal Juan Ladrilleros, en Buenaventura, los niños esperan cumplir cientos de sueños y sus profesores dicen que tienen todo el potencial.

“Me gustaría ser doctora, porque mi mamá es enfermera que vacunaba a la gente y mi papá era doctor y mi tía también. (Quiero) ayudar a las personas”, le contó Mákena, estudiante de la normal Juan Ladrilleros, a Noticias Caracol.

A su vez, otro estudiante, Óscar, comentó que cuando grande quiere ser bombero porque “a mí me gusta ayudar a mi familia y ayudar a Buenaventura para que no haya más incendios”.

César Castillo, profesor de matemáticas dice que hay tanto potencial que de esos pequeños y jóvenes pueden salir más científicos.

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“En Buenaventura hay mucho potencial. Puede haber muchos Raúl Cuero, el científico; muchos Fernando Montaño, en el ballet; en el tema del deporte muchos Freddy Rincón, Adolfo Valencia; también en la música, en el teatro. Buenaventura tiene mucho potencial, falta es canalizar todo eso que se tiene y trabajar para un mismo lado”, dice César Castillo, profesor de matemáticas.

En el deporte, el profesor Pateson Gamboa señaló que ha logrado sacar deportistas que en el exterior han mostrar sus logros.

Por ello, profesores y niños envían un mensaje a quienes toman decisiones para Buenaventura.

“Yo le pido a nuestros mandatarios de Buenaventura, a nuestros líderes, que nos enfoquemos más que todo en crear mentes positivas, en crear, crear eventos. Si Buenaventura gozará de eventos cada mes, cada dos meses, deportivos, en baloncesto, fútbol, patinaje, créame que eso sería diferente. Porque si (hay) 100.000 personas haciendo cosas malas y una hace una cosa buena estamos salvándola”, señala Peterson Gamboa.

“Cuiden bien a los niños, que protejan a los niños y que los grandes se cuiden para que no los vayan a matar”, es el llamado de Mákena.

Y es que en Buenaventura tanto grandes como pequeños esperan una oportunidad para ser "una nueva sociedad" en una región que pide cambios.

El puerto no es solo violencia y crisis, Buenaventura goza de excelentes playas, reservas naturales, gastronomía autóctona y hasta planes para el avistamiento de ballenas, lo que hace que el sector turístico genere miles de empleos.