En la mañana de este lunes 9 de diciembre se publicó un nuevo informe de Human Rights Watch (HRW) en el que se expuso una serie de violaciones laborales y hasta explotación sexual en contra de mujeres que trabajan en la industria webcam de Colombia.
Acorde con el documento oficial , de 175 páginas, muchas modelos webcam del país han trabajado en condiciones precarias e insalubres, pues, entre muchas cosas, afirman que los estudios en los que suelen desempeñarse laboralmente no cuentan con buena ventilación y pueden tener cucarachas, chinches o hasta fluidos corporales de otras personas.
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Lo anterior ha conllevado a que quienes trabajan en estos lugares desarrollen sarpullidos, infecciones y, pese a todo esto, no cuenten con apoyos suficientes en materia de salud mental por parte de sus empleadores.
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Pero esto no es todo. Además de la poca salubridad de los estudios, quienes trabajan en estos lugares suelen recibir remuneraciones injustas. Lo anterior porque, afirma el reporte, en la gran mayoría de los casos quienes se desempeñan en estos trabajos aseguran no tener un contrato laboral que fije sus días de descanso, sus pagos o hasta las prestaciones sociales, lo que se presta para el robo de salarios.
La situación es compleja si se tiene en cuenta que esta industria produce millones de dólares en todo el mundo y, pese a ello, los trabajadores y trabajadoras webcam de Colombia llegan a recibir incluso solo un 30% de lo que pagan las plataformas en las que se comercializan sus contenidos.
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El resto del dinero, sostiene el informe, se lo quedan las empresas para las que trabajan, las cuales, en muchos casos de Colombia, amenazan a sus modelos con retener sus perfiles, las obligan a trabajar durante largas jornadas, les imponen amonestaciones por ir al baño y las someten a actos dolorosos y no consensuados, según el documento.
"Las modelos dijeron que los gerentes del estudio usan la amenaza de prohibirles las cuentas o reducir el tráfico para ejercer una intensa presión sobre ellas para que trabajen largas horas sin comida ni agua y para que realicen actos sexuales que no habían consentido", explica HRW en su comunicado sobre dicho informe.
Muchos estudios webcam en Colombia habrían permitido trabajar a menores de edad
Otro alarmante dato del informe sostiene que muchas de las personas que trabajan en el sector afirman haber recibido invitaciones para iniciar labores en este mundo siendo aún menores de edad . Aunque las plataformas lo prohibían, las compañías las hacían pasar por otras personas adultas utilizando perfiles de modelos en retiro.
"Si bien todos los entrevistados eran adultos, varios informaron que los estudios les permitieron comenzar a trabajar cuando eran niños y violaron las restricciones de edad de las plataformas al 'reciclar' cuentas que estaban registradas a nombre de ex modelos adultas", dijo HRW en su comunicado sobre el informe.
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Frente a esto, algunas de las principales plataformas de servicio webcam respondieron a los autores del informe y otorgaron políticas y las medidas necesarias que usan para prevenir e identificar la trata de personas y la explotación infantil, sin embargo, negaron su obligación en estos abusos presentados en los estudios de "sus cadenas de suministro".