El caso de la bebé muerta en Galapa , Atlántico, dio un drástico giro. Allegados señalaban a un joven de 17 años, pareja de la madre de la niña, de haber asesinado a la pequeña e infligir abuso sexual sobre ella.
Gracias al dictamen de Medicina Legal se descubrió que la niña no fue víctima de homicidio, sino que había fallecido “por una enfermedad pulmonar e intestinal”. Además, no se halló material genético que corroborara el supuesto caso de acceso carnal.
El joven recibió la libertad tras varios días en un centro de menores de Barranquilla.
Defensa presentará acciones legales contra el Estado al señalar que hubo daños y perjuicios al acusado en el caso de la bebé muerta en Galapa y que resultó ser inocente.