Las Fuerzas Militares reiniciaron las ofensivas contra las disidencias de las FARC tras la suspensión del cese al fuego
que ese grupo violó en 225 ocasiones, según un informe conocido por Noticias Caracol.
La ofensiva contra las disidencias de las FARC, ordenada por el presidente Gustavo Petro, se retomó luego de la suspensión del cese al fuego con ese grupo tras el asesinato de cuatro menores indígenas en Putumayo.
La orden la dio el comandante general de las Fuerzas Militares, el general Helder Giraldo, en los departamentos de Meta, Guaviare, Caquetá y Putumayo.
"Reanudar las operaciones militares contra estos grupos debe estar encaminado principalmente a establecer el control territorial y proteger a la población civil, dado que es previsible que en las próximas semanas veamos un incremento de acciones contra la fuerza pública y las comunidades, como lo vimos hoy en el Catatumbo", señaló Jorge Mantilla, investigador en conflicto y crimen organizado.
Un informe reservado de agencias de inteligencia en Colombia da cuenta que las disidencias de alias ‘Iván Mordisco’, o estado mayor central, cometieron 225 violaciones del cese al fuego, específicamente 63 en enero, 65 en febrero, 42 en marzo, 39 en abril y 16 en mayo, principalmente en los departamentos de Cauca (92), Meta (28), Nariño (23), Valle del Cauca (20) y Caquetá (19).
Publicidad
Por otro lado, el experto en seguridad Iván Díaz precisó que "es claro que fue un tiempo en el cual ganaron espacios y capacidades y ahora tendrá, un poquito tarde, la responsabilidad el Estado en ejercer a través de operaciones militares y policiales que recuperen los espacios que se perdieron en estos casi 3 meses y medio de cese bilateral".
Entre esas violaciones al cese al fuego hay 33 asesinatos, que corresponden a 29 civiles, dos militares y dos policías.
Publicidad
Alias ‘Danilo Alvizú’, señalado del asesinato de cuatro menores indígenas
El responsable de esta nueva crisis y sobre todo de la indignación nacional tras el asesinato de cuatro menores cuando huían de las filas de los violentos es Yeison Alexis Ojeda, alias ‘Danilo Alvizú’
, comandante del frente Carolina Ramírez, del estado mayor central de las disidencias de las FARC.
Esta estructura opera principalmente en el sur del país, en el departamento de Putumayo, en municipios como Puerto Guzmán y Puerto Caicedo, y también en Piamonte, Cauca, y en límites entre el departamento de Putumayo y Amazonas.
El accionar de este grupo ha sido tal que este año se emitió una alerta temprana de la Defensoría del Pueblo en la que se advirtió del inmenso riesgo de reclutamiento, sobre todo de menores indígenas, 18 de los cuales fueron llevados a la fuerza a las filas de ese grupo el año pasado y 10 en lo que va de este año.
“El reclutamiento no les es ajeno, no les es ajeno ese ejercicio de violencia, pero tampoco les es ajeno una violencia sediciosa en contra de sus adversarios, en este caso por la cruenta confrontación con los comandos de frontera, pero lo cierto es que sí hace parte de su patrón de violencia el reclutamiento”, señaló Alejandro Restrepo, investigador de la Fundación Pares.
Publicidad
Al frente Carolina Ramírez se le atribuyen en solo cinco meses más de 80 acciones contra el cese al fuego y se considera como un frente reclutador y sanguinario.