Una larga y desgastante batalla judicial al fin le dio la razón a la abogada Diana Forero, quien en 2015 denunció a su exesposo, un exjuez de la República, además quien fuera magistrado auxiliar del Tribunal Superior de Bogotá y defensor público en la Defensoría del Pueblo, por maltrato.
“Esto llamó la atención de la mayoría de los fiscales y por lo menos los dos o tres que se interesaron en mi proceso le dieron el impulso necesario para llegar en su momento a juicio. Estando en juicio los aplazamientos eran muchísimos como estrategia para buscar una prescripción del delito”, cuenta Forero.
Señala la abogada que desde que inició su proceso tuvo que contar su historia a unas 35 personas, haciendo toda esta situación aún más revictimizante.
“La estrategia defensiva del agresor para su momento, que fue aplazar las audiencias, además de la demora que tuvo el tribunal para decidir en segunda instancia fue lo que llevó a que el proceso durara casi siete años”, manifestó.
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Solo este año, unas 16 mil personas han denunciado ser víctimas de violencia intrafamiliar. Expertos indican que la cifra se podría triplicar si en todos los casos se denunciaran estos hechos.
“La demora judicial sí afecta que uno quiera denunciar, además de la estigmatización. En mi caso, que soy abogada, los comentarios eran terribles”, manifiesta la víctima.
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Ahora, el exesposo de Forero es buscado por las autoridades para que responda por violentar a su expareja.