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En medio de la operación Osiris, murió el intendente de la Policía Edwin Guillermo Blanco Báez, uno de los 500 comandos que hicieron parte de la captura del máximo cabecilla del Clan del Golfo, alias ‘Otoniel’.
En su natal Güicán, Boyacá, el cuerpo del suboficial fue recibido con una calle de honor hecha por uniformados, amigos y familiares.
Hace 16 años, este boyacense ingresó a la Policía Nacional y desde hace ocho hacía parte de la Dirección de Carabineros.
“Nuestro intendente, Edwin Blanco, con cámara ardiente, honores fúnebres correspondientes a un héroe de la patria, venimos acompañando su familia”, manifestó el coronel Jorge Miguel Cabra, comandante de la Policía de Boyacá.
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La tristeza embarga a esta familia boyacense, que asegura que el intendente, que tenía tan solo 34 años y más de 25 condecoraciones, será por siempre un héroe de la patria.
“La familia solo le pide a Dios que Edwin sea el último muerto que ponga esta inútil guerra y que los delincuentes se den cuenta del daño tan grande que le hacen a una familia”, expresó Ricardo Riaño Cocunubo, familiar del intendente fallecido.
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El uniformado será recordado por su liderazgo, servicio, dedicación y amor a la familia características que lo llevaron a destacarse dentro de la institución. Sus honras fúnebres se realizarán este lunes en la tarde.
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