Tripulantes de una ambulancia que llegaron al centro de Bogotá fueron sorprendidos por un delincuente que se les colgó del espejo. No está claro si iba únicamente por esa pieza del vehículo o si intentaba asaltarlos.
El conductor decidió seguir su camino, aunque el sujeto siguió aferrado por varios metros.
La unidad había sido solicitada en el barrio San Bernardo para que atendiera a una persona que estaba tendida en la calle y que había sido apuñalada.
Los ocupantes de la ambulancia tuvieron que solicitar apoyo de la Policía Metropolitana de Bogotá para poder atender el caso.
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