El papá de una las niñas que fueron intercambiadas al nacer en un hospital de Barranquilla en 2016 tiene el corazón dividido entre el amor por la que crio y la que lleva sus genes.
“Lo que quiero por lo pronto es registrar la niña y me imagino que tocaría también anular el otro registro, que no sería lo ideal, pero yo quiero registrar a mi niña con mi apellido”, dijo.
El hombre, ahora que descubrió que estaba criando a la niña equivocada, quiere recuperar a su hija biológica, a quien acaba de conocer. Para ello, acudió a un abogado.
“Siento que he perdido mucho tiempo con ella y pasado unos de los mejores años de la nena sin ella. Entonces, quiero reivindicarme con ella”, indicó.
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Su hija biológica fue entregada por error a una mujer que vive en Chiriguana, Cesar, mientras él tenía a la hija de ella en su casa en Santo Tomás, Atlántico. Esta madre dice que no entregará a la niña que crio, pues, para ella, es su hija.
“No lo creo porque yo quiero es a mi hija, a la que tengo, a mi Saray. La verdad, yo la he tenido todo este tiempo, no fue ni un mes ni dos meses, cuatro años”, afirmó.
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Pese a su deseo de querer tener a su hija biológica, el hombre señala que ni su familia ni él están preparados para entregar a la pequeña que han tenido desde su nacimiento y que durante cuatro años creyó que era su verdadera hija.
“Eso es lo más teso de la historia, entregar a la nena porque ya también tenemos mucho amor con la nena y es difícil desprenderse de ella. Ahorita, decir ‘toma, llévate a la niña’ no es fácil. Entonces, allí es donde necesitamos la ayuda de los profesionales”, aseguró.
Funcionarios del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar en Atlántico visitaron a las familias para iniciar un proceso de acompañamiento sicológico en medio de esta difícil situación.
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