Estas son las cuentas pendientes que exjefes paramilitares tienen con Colombia.
Salvatore Mancuso : el excomandante del bloque Catatumbo tiene tres sentencias de Justicia y Paz. En un solo proceso confesó 402 crímenes perpetrados por sus hombres en la costa Atlántica y el Catatumbo, que van desde masacres, torturas, reclutamiento de menores, desaparición forzada y desplazamiento hasta narcotráfico. Por su barbarie deberá permanecer ocho años preso una vez llegue al país.
Rodrigo Tovar Pupo, alias 'Jorge 40': se supone que retorna a Colombia en las próximas semanas. Tiene condenas pendientes de hasta 60 años de cárcel por delitos de lesa humanidad.
Como fue excluido de Justicia y Paz en 2015 por no colaborar con la verdad, deberá purgar esa condena completa en prisión. Su legado de barbarie lo encabeza la masacre de El Salado, donde 60 personas fueron asesinadas hace dos décadas.
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Hernán Giraldo Serna: comandó el bloque Resistencia Tayrona, que operó en la Sierra Nevada de Santa Marta. Fue condenado en Justicia y Paz por 779 hechos confesados en 17 versiones libres.
De su larga estela de delitos, su capítulo sobre violencia sexual contra 36 menores de edad es ilustrativo. Lo sentenciaron por acceso carnal abusivo con menor de 14 años, acceso carnal violento en persona protegida, actos sexuales violentos, prostitución forzada, esclavitud sexual y hasta por obligar abortos. Todavía sigue en Estados Unidos.
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Diego Murillo Bejarano: más conocido como 'don Berna', aún purga su condena de 31 años en una prisión federal. En Colombia tiene varias cuentas pendientes como excomandante de los bloques Cacique Nutibara, Héroes de Granada y Héroes de Tolová.
Participó en cerca de 400 delitos que dejaron más de 1.500 víctimas en Córdoba y Antioquia. Increíblemente, no ha sido condenado por Justicia y Paz. Sus nexos con el narcotráfico son de la época de Pablo Escobar, cuando fue jefe de sicarios de los hermanos Galeano.
Ramiro Vanoy Murillo, alias 'Cuco Vanoy': el excomandante del bloque Mineros tiene tres sentencias en Justicia y Paz. Antes de su extradición rindió nueve versiones libres. Todavía purga su condena en Estados Unidos.
Si no cumple con Justicia y Paz a su regreso a Colombia, su pena principal será de 40 años.
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Hébert Veloza García, más conocido como H.H.: el excomandante de los bloques Bananero y Calima regresó a Colombia a finales de 2017. Está en prisión por una condena de Justicia y Paz proferida en 2013. Sembró el terror en el Urabá antioqueño en los 90 y cometió varias masacres en el suroccidente del país a comienzos del 2000.
Carlos Mario Jiménez Naranjo: el excomandante del bloque Central Bolívar fue excluido de Justicia y Paz en 2014 porque no entregó todos sus bienes, trató de burlar la reparación a las víctimas y siguió delinquiendo después de desmovilizarse. Fue deportado de Estados Unidos en julio de 2019. Actualmente está en prisión en Colombia.
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Guillermo Pérez Alzate: tiene una sentencia de 2014 de Justicia y Paz por homicidio, reclutamiento ilícito, fabricación y porte de armas, tortura, narcotráfico, secuestro y desplazamiento forzado. Comandó el bloque Libertadores del Sur que hizo presencia en Nariño. En 2016 quedó libre en Estados Unidos, pero aún no regresa al país porque alega problemas de seguridad.
Juan Carlos ‘el Tuso’ Sierra; Francisco Javier Zuluaga Lindo ‘Gordolindo’, y Miguel Ángel Mejía Munera, alias El Mellizo, fueron excluidos de Justicia y Paz porque eran narcos colados en el proceso de paz con los paramilitares.
‘El Tuso’ se quedó en Estados Unidos, Gordolindo sí fue deportado y está detenido, mientras que ‘el Mellizo’ debería retornar en los próximos días, aunque se dice que estaría tramitando un asilo.
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