La crisis por el COVID-19 en Antioquia se agudiza. Cuatro importantes centros médicos se declararon en emergencia, pues la capacidad de atención en las UCI, salas de hospitalización y urgencias están al 100%.
Son el Hospital Pablo Tobón Uribe, la Clínica Prado, la Clínica CES, en Medellín, y el Manuel Uribe Ángel, de Envigado.
En otros centros asistenciales, como la Clínica Medellín de Occidente, la batalla diaria contra el COVID-19 no se detiene.
“Esta historia es repetida al infinito, día tras día estar teniendo una serie de pacientes fallecidos o muertos que, pese a lo que la mayor parte de la gente piensa, en las unidades de cuidados intensivos la mortalidad no la teníamos en esas cifras que tenemos hoy”, dice Yebrail Díaz, intensivista de ese centro médico.
Publicidad
En este lugar, la impotencia conversa con la esperanza cada minuto. Detrás de cada paciente hay una historia, una familia y, en los peores de los casos, un lamentable final que muchos quisieran no tener que experimentar.
Los médicos cada día se sienten más devastados por lo que les toca afrontar por cuenta del COVID-19.
Publicidad
Vea además:
“Seguimos cansados, muy cansados, no vemos la hora de que esto disminuyera un poquito y que pudiéramos retornar un poquito a la normalidad”, reitera el profesional.
Al otro lado de la ciudad, en la clínica Cardio Vid, las UCI también están al límite. Aunque su especialidad es la cardiología, el 75% de las camas está ocupado con pacientes COVID.
“Para uno a veces es difícil, la angustia más grande es no tener en algún momento el recurso para atender a todos los que uno quisiera atender”, manifiesta Juan David Uribe Molano, jefe de la Unidad de Cuidado Intensivo de la Clínica Cardio Vid.
Publicidad
El panorama en los centros de salud es cada vez más complejo.