Noticias caracol no solo voló en Suecia el Gripen, uno de los aviones de combate más modernos que se producen en el mundo, también logró conocer en qué consiste la transferencia de tecnología que Saab, industria militar sueca, ofrece a los países que adquieren este jet. Brasil, entre otras cosas, montó una planta de ensamblaje de este avión.
Un equipo de Noticias Caracol fue testigo de la versatilidad, el poder y el muy avanzado nivel de desarrollo tecnológico que Saab está implementando en su avión de combate.
Ingenieros suecos, incluidos mujeres y jóvenes, ensamblan a mano cada una de las 120.000 piezas de la aeronave y tienden los 30 kilómetros de cables que tiene el jet. En cuestión de pocos meses lo dejan perfectamente armado.
Además de producir un avión de altos niveles de competitividad, los suecos le han apostado a la transferencia de tecnología como un plus para aquellas naciones que han comprado Gripen. El caso más cercano a Colombia es el de Brasil, que ya tiene en operación seis de las primeras 36 aeronaves adquiridas.
El desarrollo del Gripen brasilero deja hoy 62 proyectos de transferencia en tecnología que garantizan innovación y trabajo en Brasil durante los próximos 40 años.
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“Esta alianza estratégica pensada a largo plazo, como decimos internamente, es como un matrimonio, y la filosofía es que seamos completamente parte del programa de Gripen. Hemos establecido una red en Brasil con muchas empresas que, por ejemplo, hacen parte del centro de diseño y de desarrollo del jet”, señaló el coronel Claudio Olivera Marques, director del programa Saab de la Fuerza Aérea de Brasilera.
Esto quiere decir que Brasil, que enfocó todo el potencial de la transferencia tecnológica en su industria aeronáutica, tiene lista en Sao Paulo la línea de producción para arrancar a ensamblar 15 de los 36 aviones. Los brasileños, entre los 62 proyectos, fabrican la pantalla de control del avión, que de ahora en adelante tendrán los Gripen que vuelen en todo el planeta.
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“Suecia no depende de ningún otro país para tener una disuasión creíble. Cuando exportamos el Gripen a cualquier otro país, consideramos a este país no como un cliente, sino como un aliado”, precisó Richard Smith, subdirector global de ventas y mercadeo en Saab.
Pero el camino no ha sido fácil y el desarrollo del Gripen brasilero ha tenido muchos desafíos, uno de ellos es el clima. “En el Amazonas tenemos condiciones climáticas únicas, es un ambiente único en el mundo. Para Suecia era completamente nuevo, porque ellos están acostumbrados al clima frío extremo, de modo que la Fuerza Aérea Sueca tiene requerimientos para que el avión pueda operar en condiciones de muy baja temperatura. A los sistemas electrónicos no les gusta el calor, de modo que Brasil tuvo que poner esos requerimientos sobre la mesa y hoy estamos seguros de que Gripen va a satisfacer completamente nuestras necesidades operacionales”, agregó el coronel Claudio Olivera Marques.
La Fuerza Aeroespacial Colombiana tiene al Gripen dentro de sus opciones para renovar su escuadrón de superioridad aérea, hoy conformado por los Kfir. Más allá de la efectividad y el desarrollo tecnológico del avión y de su costo de operación, ¿qué significaría para Colombia comprar el avión sueco? Saab tiene claro que la transferencia de tecnología no solo estará amarrada al sector defensa. Educación, salud o desarrollo del campo y la industria podrían ser parte de ella.
“La capacidad de este avión no tiene igual. Yo creo que es ideal para la Fuerza Aérea Colombiana por el tipo de operaciones que se hacen en el país. Además, nuestra visión sobre la cooperación industrial es única. Esto significa generación de empleo durante los próximos 30 o 40 años”, enfatizó Richard Smith.
Brasil escogió el Gripen entre tres plataformas de última generación. Sus pilotos, tras haber participado en el desarrollo de esta aeronave, aseguran que su país no se equivocó. Gripen también es interoperable con las Fuerzas Aéreas de la OTAN.
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La FAC durante años ha logrado posicionarse en los ejercicios de esta alianza con los Kfir, a los que por el tiempo de uso se les acabó la gasolina y a los que, según los expertos, hay que cambiar, no por un lujo, sino por imperativo de seguridad nacional y capacidad de disuasión.
La Fuerza Aérea y el Gobierno nacional que llevan doce años evaluando cuál plataforma incorporar saben que más temprano que tarde deberán definir qué avión adquirirán para la FAC.
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