La incertidumbre y el temor agobian a más de 4.000 desplazados en Ituango. Se trata de campesinos que debieron abandonar sus territorios por la violencia y ahora están refugiados en albergues de dicho municipio de Antioquia.
En las esquinas de salones de clase están arrumadas las pertenencias que alcanzaron a sacar de sus hogares. En el piso, permanecen las colchonetas que tienen que compartir los desplazados en Ituango, que en varias oportunidades, se han mojado producto de las lluvias.
“Tenemos una problemática con la amanecida, porque tenemos 4, 5 personas amaneciendo en una misma colchoneta”, señala uno de los desplazados de Ituango.
Algunas mujeres víctimas del desplazamiento forzado cocinan en ollas que ni alcanzan para alimentar a las más de 4.000 personas que están allí.
La cena se convierte en toda una odisea para no acostarse con el estómago vacío, pues las filas se extienden hasta tres cuadras y las personas deben esperar hasta tres horas para comer.
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“La alimentación, según información que hemos recibido, no está satisfaciendo totalmente a toda la población”, indicó Yesid Zapata, defensor de derechos humanos.
Por ello, desde Medellín, Isabel Cristina Palacio, quien nació en ese municipio y también le tocó padecer la violencia desde los años 80 en este municipio de Antioquia, está recolectando ayudas para estos desplazados en Ituango.
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“Pueden donar kits de aseo, pañales, leche para bebés, pueden donar ropa en buen estado, cobijas, colchonetas, alimentos no perecederos”, señaló.
Quienes quieran sumarse a estas donaciones pueden realizarlas en la Casa Centro Cultural, ubicada en Maracaibo, y en el bar Valhalla, localizado en la Villa de Aburrá.
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