Ciclista presuntamente arrollado por carro fantasma en Bogotá era el único soporte de su mamá

El pasado lunes el Ojo de la Noche de Noticias Caracol reportó la muerte de un ciclista durante la madrugada en el sector de Tres Esquinas, en la vía que conduce de Mosquera a Bogotá. El hombre fue identificado como Juan Carlos Campos Ramírez, un comerciante de 31 años.

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Su familia ha expresado malestar por lo que las autoridades les han explicado respecto a las causas de la muerte. “Nos dijeron que el muchacho iba en la cicla y perdió el equilibrio, se cayó y se pegó un golpe en la cabeza y murió, pero pues (…) yo miré algunas fotos y eso no fue de un golpe en la cabeza”, afirmó una allegada.

Esta mujer asegura que “la funeraria me llamó y me dice que él tiene aplastamiento de cráneo, entonces pues sí fue un carro el que lo atropelló”, concluyó ella.

En nombre de los allegados de Juan Carlos Campos, el ciclista fallecido, pide que si alguien presenció el accidente entregue información para dar con el paradero del culpable: “Que por favor nos ayuden a contactarlo para saber quién fue el que hizo eso, de pronto sí fue un accidente, pero el señor debió haber parado, pero ni siquiera paró, ni siquiera hay huellas de que el señor frenó, simplemente le pasó el carro”.

La madre de Juan Carlos se encuentra muy mal de salud por lo ocurrido ya que él era su soporte y única compañía.

Dolor en Valle del Cauca por fatal accidente de reportero en EE. UU.

Una dramática historia está viviendo la familia del reportero colombiano José Luis Quijano, quien perdió la vida junto a su padre en un grave accidente de tránsito registrado en Oklahoma, Estados Unidos  .

Asonada en Candelaria, Atlántico, tras muerte de detenido cuando era llevado a estación de Policía
Ahora la familia de las víctimas pide ayuda para poder realizar los trámites de repatriación de los cuerpos, tanto del reportero colombiano, que tenía 25 años, como el de don Víctor Quijano, de 52.

“En este momento estamos pidiendo encarecidamente una visa humanitaria para mi mamá para poder viajar en el transcurso de esta semana para estar con mi hermano y con mi papá”, manifestó Mario Fernando Quijano, hermano e hijo de los fallecidos.

Por ahora esperan ayuda de la Cancillería para repatriar los cuerpos, pues hacer la diligencia de forma privada les puede costar entre 60 y 80 millones de pesos, dinero que no tienen.