En la investigación que adelanta la Fiscalía General de la Nación por la muerte del coronel Óscar Dávila, dos de los citados a declarar, el coronel Carlos Feria y el abogado Miguel Ángel del Río, no cumplieron la cita.
El jurista ya le había manifestado al ente investigador desde el miércoles 14 de junio que no se haría presente porque, según él, su declaración no era importante, ya que sus acercamientos con el coronel Oscar Dávila al parecer fueron netamente profesionales.
Del Río resaltó punto a punto las fechas en las cuales se habría reunido con el uniformado y, también, los días en los que los investigadores de su bufete se encontraron con él.
El abogado le confirmó a Noticias Caracol que el coronel Óscar Dávila le pagó 50 millones de pesos, a través de uno de sus investigadores, justamente para dar trámite a lo que sería la defensa del uniformado de la Policía en medio del escándalo de las chuzadas y todo lo relacionado con el caso de la exjefa de gabinete Laura Sarabia. Pero también sostuvo que, una vez falleció el oficial, ese dinero fue reintegrado en su totalidad a la viuda.
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Otro de los que no cumplió la citación de la Fiscalía fue el coronel Carlos Feria, jefe de seguridad de Presidencia, quien informó que por razones netamente profesionales no podía ir. Y es que el uniformado se encuentra acompañando al presidente Gustavo Petro en Alemania.
Quien sí acudió a la cita con la Fiscalía fue el capitán de la Dijín Carlos Andrés Correa Loaiza, quien asistió a la antigua sede del DAS. Allí expresó su deseo de guardar silencio ante los hechos que investiga el ente judicial por las interceptaciones ilegales hechas a las exempleadas de Laura Sarabia tras el robo de un dinero que la exfuncionaria tenía en su casa.
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La Fiscalía General de la Nación investiga la presunta comisión de los delitos de fraude procesal, falsedad en documento público y violación ilícita de comunicaciones.
Sigue la polémica por las chuzadas
Según una publicación de la revista Semana, que cita una fuente anónima, la suma que se perdió era de 3.000 millones de pesos que supuestamente pertenecían al presidente Gustavo Petro.
Tanto el mandatario como su exjefa de gabinete, Laura Sarabia, se pronunciaron rechazando dichas afirmaciones y denunciando que todo se trata de una maniobra que busca desprestigiar al Gobierno nacional.
“Jamás en mi vida he recibido, en ninguna calidad ni por ninguna persona, tal cantidad de dinero. Nunca he visto una cifra ni siquiera cercana”, señaló Laura Sarabia.