Un juez de Funza determinó que la investigación por la muerte de Jorge Enrique Pizano, excontroller de la Ruta del Sol y testigo clave del caso Odebrecht, y su hijo Alejandro, no puede precluir.
El togado le ordenó a la Fiscalía General de la Nación que continúe con la investigación para establecer si la muerte de Jorge Enrique Pizano se trató de un asesinato.
Ha dicho este juez que la conclusión de que Jorge Enrique Pizano falleció por causas naturales fue "apresurada", que los galenos que tuvieron a cargo la necropsia del testigo no abordaron otras tesis de muerte diferentes a esta razón.
Además, el juez fue tajante en señalar que la necropsia no despejó las sospechas que se presentaron en el caso, el análisis toxicológico se hizo con muestras no adecuadas, el informe médico-legal no tuvo en cuenta todas las evidencias, que la botella incautada con el cianuro tenía muestras de ADN y existe posibilidad de que este frasco haya sido dejado por otra persona diferente a Jorge Enrique Pizano en la finca en donde fallecieron padre e hijo.