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Una menor de edad sería quien embolsaba cadáveres en la llamada casa del terror de Kennedy

Ella y cinco criminales más fueron privados de la libertad. Lo que hacían era espantoso: grababan los asesinatos y enviaban pruebas a su líder, quien ya estaba en prisión.

Una menor de edad sería quien embolsaba cadáveres en la casa del terror de Kennedy

A la cárcel fueron enviados peligrosos criminales señalados de asesinar y descuartizar a sus enemigos en Kennedy, sur de Bogotá. Se trata de cinco hombres y una menor de edad que, según las autoridades, se encargaba de embolsar los cadáveres.

Estas seis personas, según la Fiscalía, son las responsables de varias de las muertes violentas que ocurrieron en la localidad de Kennedy y donde los cuerpos fueron embolsados y abandonados en la vía.

De acuerdo con la investigación, luego de que la menor guardaba los cadáveres, estos eran trasladados en carretas y posteriormente abandonados en la calle. Así ocurrió el pasado 25 de agosto en el barrio El Amparo, donde tres hombres y una mujer fueron asesinados. Los cuerpos de ellos aparecieron, pero de ella solamente se hallaron algunos fragmentos.

"'Luisito', 'Cejas' y 'Guaya' salieron como a las 11:30 de la noche y dejan encargado al 'Flaco' y otra femenina, mientras ellos encontraban la carreta para sacar a la femenina. Refieren que entre las 12:40 a.m. y la 1:00 a.m. del día 25 sacan a la muchacha en otra carreta", dijo la fiscal encargada del caso.

Según las autoridades, estas cuatro víctimas habrían sido torturadas y asesinadas en un predio denominado la casa del terror, lugar en el que la banda celebraba sus crímenes con fiestas que incluía licor y estupefacientes.

“Cuando son sometidas estas personas a ese interrogatorio para obtener información, cuando fueron atados de pies y manos dejándolos indefensos. Actos demostrativos del más alto desprecio por la vida”, añadió la fiscal encargada.

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La banda trasnacional grababa sus crímenes y posteriormente enviaba pruebas de las muertes al líder de la organización ilegal, quien está tras las rejas. “Realizando videollamadas, fotografías a una persona que, al parecer, se encontraba en un establecimiento carcelario dando parte del trabajo realizado”, concluyó la fiscal.

Los procesados no aceptaron los delitos de homicidio agravado y tortura. Sin embargo, fueron enviados a prisión y también podrían enfrentar el cargo de desaparición forzada, si no aparece el cuerpo de la mujer embolsada en esta casa del terror.

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