Tras los cierres de los cementerios distritales de Bogotá
por la no continuidad del contrato de concesión para prestar los servicios funerarios, comenzaros a represarse los sepelios en la ciudad. ¿Qué hará el Distrito para resolver esta situación?
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Se anunció que, ante la crisis que se presenta entre el operador de los cementerios y la Unidad Administrativa Especial de Servicios Públicos (UAESP) en Bogotá, quedaron suspendidas las visitas a los camposantos hasta el domingo 8 de octubre de 2023.
Nadya Rangel, secretaria de Hábitat de la ciudad, pidió a quienes tienen planeado visitar a sus familiares y amigos en los cementerios, permitir hacer los ajustes operativos pertinentes para así hacer el ingreso normal al lugar a partir del domingo 8 de octubre de 2023.
Por su parte, la alcaldesa de Bogotá, Claudia López, aseguró por medio de sus redes sociales que no hay una emergencia sanitaria ante el abandono del concesionario.
Entretanto, los 16 cadáveres que en promedio entran a los cementerios diariamente se trasladarían a entidades privadas para sus honras fúnebres.
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"Vamos a redireccionar, contratando por urgencia manifiesta con otros operadores privados, los servicios funerarios que venían destinados o ya tenían licencia de la Secretaría de Salud para el servicio público funerario", explicó Juan Carlos López, director de la UAESP.
Pese a esto, muchos bogotanos ya se ven afectados por las intermitencias en la prestación del servicio, situación que comenzó por un problema de carácter administrativo y legal por presuntas irregularidades en la tramitación de las licencias funerarias.
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"Vamos a mantener cerrados los cementerios hasta tanto la UAESP no realice el inventario y el recibo formal, porque de otra manera se pueden presentar saqueos que nosotros no vamos a asumir", declaró Éder Parada, representante legal de Jardines de Luz y Paz SAS.
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