Pese a que asegura estar de acuerdo con no usarlo, y aunque en el Concejo avanza la iniciativa, el alcalde se excusa en motivos legales.
Recientemente el Concejo de Bogotá aprobó, en primer debate, que no se utilicen elementos o productos que contengan fibra de asbestos en construcciones públicas.
Aunque parecía un paso importante, el alcalde Enrique Peñalosa anunció que no puede dar su aval.
“Todos coincidimos en que no queremos asbesto, estamos totalmente de acuerdo con los concejales, lo único que estamos diciendo es que sería ilegal de nuestra parte. Nosotros incurriríamos en problemas legales si sancionamos un acuerdo que no nos corresponde”, manifestó Peñalosa.
Pero ¿por qué nueve municipios en el país se han sumado a esta cruzada de prohibir está fibra y la capital parece cerrarle la puerta? Para la secretaria jurídica de Bogotá, Dalia Hernández, la falta de voluntad política proviene del Congreso de la República, que es el competente y el cual desde 1998 vendría dilatando el trámite de este proyecto.
“Aquí hay un problema de competencia y puede ser demandado el acuerdo del Concejo. Vamos a revisar, obviamente, si de salir tal y como está aprobación en primera Comisión de gobierno, pueden existir muchas demandas y problemas para el Distrito”, manifiestó la funcionaria.
Añadió que “estaríamos interviniendo en temas que son absolutamente de orden legal y no de orden territorial”. La norma, que se espera sea aprobada en el Concejo, fijará como criterio uso de materias primas, sustitutos materiales o las nuevas alternativas tecnológicas con los cuales se pueda reemplazar la fibra de asbesto. Puede ver:Bogotá, un paso más cerca de prohibir el asbesto
Según expertos, cerca de 500 personas son víctimas en Colombia de esta fibra.
¿Les cumplirá el Congreso a víctimas del asbesto que, antes de morir, clamaban por su prohibición?
Updated: junio 04, 2019 02:06 p. m.