Durante varios meses, agentes de la Policía Metropolitana de Bogotá se disfrazaron y vivieron como habitantes de calle para identificar el modus operandi de dos bandas delincuenciales dedicadas al hurto y microtráfico en varias localidades de la capital colombiana.
Según la investigación, que duró alrededor de 6 meses, los criminales movían mensualmente más de 500 millones de pesos.
De acuerdo con lo informado, las bandas delinquían en las localidades como Antonio Nariño, Puente Aranda, Los Mártires, Suba, Kennedy, Tunjuelito y Rafael Uribe Uribe.
Habitantes de calle eran policías
Las autoridades de Bogotá capturaron a 37 personas durante el fin de semana, a las que se les incautaron 14 mil dosis de estupefacientes. Se dedicaban no solo al hurto, también al tráfico de estupefacientes y vendían papeletas desde 5 mil pesos en adelante.
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Los policías que se disfrazaron de habitantes de calle lograron obtener evidencias con las que fue posible capturar a los señalados delincuentes.