Para los expertos, el COVID-19 en Bogotá pareciera mantenerse controlado. Así lo deducen tras observar el comportamiento que ha tenido en las últimas semanas el porcentaje de ocupación de camas UCI.
“La ocupación de las UCI viene en descenso, estamos sobre el 40%, aproximadamente, sigue existiendo una demanda importante en las llamadas de las EPS y en los servicios de urgencias, pero estamos estabilizados, señala Herman Bayona, presidente del Colegio Médico de Bogotá .
En el más reciente reporte del Observatorio de Salud de Bogotá, Saludata, con corte al 15 de octubre, la ocupación total de unidades de cuidado intensivo estaba en 63,7 %. Para pacientes con COVID-19 está en 47,5 %.
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“De camas exclusivas de COVID aproximadamente está en un 48% y en ocupación de camas de UCI en general está en un 63%, esto se da porque las unidades de cuidados intensivos se abren un poco más a patologías diferentes a COVID. Sin embargo, seguimos teniendo casos que están aún hospitalizados”, comenta Fredy Guevara, médico internista e infectólogo.
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Según Saludata, Bogotá tiene 292.964 casos confirmados de COVID-19 y 23.712 casos activos.
Aunque se han presentado picos leves de muertes en el último mes, la Secretaría de Salud aseguró que la segunda ola fuerte del virus vendría en aproximadamente dos meses.
"Esperamos poder pasar por este segundo pico de la enfermedad que, calculamos, aproximadamente será a finales de noviembre a inicios de diciembre, pero que solo el tiempo nos lo dirá", indicó el secretario Alejandro Gómez.
El Distrito no descarta nuevas cuarentenas sectorizadas, razón por la que los expertos invitan al extremo autocuidado.
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“Las cuarentenas sectorizadas serían un mecanismo para enfrentar precisamente esos nuevos picos. Realmente no deben ser tan fuertes como el que vivimos anteriormente, deben ser mucho menores, pero son peligrosos”, puntualiza Bayona.
Aseguran además que, con la llegada de la minga indígena a la ciudad, el gobierno deberá extender al máximo los protocolos de bioseguridad y temprano diagnóstico para evitar posibles fluctuaciones en la curva del virus.