Durante la audiencia en la que enviaron a 22 de los presuntos miembros de Los Camilo a la cárcel, la Fiscalía General puso al descubierto cómo delinquían los delincuentes en las localidades de Bosa, Kennedy y Tunjuelito, en Bogotá.
Una de las estrategias de Los Camilo para evadir a las autoridades mientras distribuían droga era “enviar mujeres bonitas para lograr que los policiales trancen y así mismo (Reinel) es una de las personas que entrega estupefacientes en los puntos que transporta en el vehículo que maneja como Uber o en su motocicleta”, detalló la fiscal del caso.
Añadió que “Leonardo Achipiz, señala el agente encubierto en referencia a él, que se le dice alias ‘Sebastián’, es una de las personas encargadas de entregar la droga en los puntos, que él recibe el dinero producto de las mismas de los administradores”.
Homicidio, concierto para delinquir agravado, tráfico, fabricación y porte de armas de fuego y de estupefacientes fueron los delitos imputados a los señalados criminales de Los Camilo, cargos que ninguno aceptó.
Publicidad
Alias ‘Pescadito’, jefe de la organización, fue capturado por segunda vez, luego de ser condenado a sus 18 años por varios asesinatos.
Para la caída de Los Camilo
fue necesaria la participación de varios agentes encubiertos y la interceptación de más de 100 líneas telefónicas.