Las 4 pruebas que hundieron a John Poulos por feminicidio de Valentina Trespalacios

John Poulos fue condenado a 42 años y ocho meses de cárcel por ser el responsable del feminicidio de la joven DJ Valentina Trespalacios. Estas son las pruebas que llevaron al estadounidense a prisión.

>>> Más sobre el caso: John Poulos le negó la mano y se burló del juez que lo condenó a 42 años por feminicidio

1. La prueba reina: la necropsia al cuerpo de Valentina Trespalacios: Allí se evidenciaron signos de violencia antes de su muerte, derribando la versión de John Nelson Poulos. En esta necropsia se reveló que el cuello de Valentina tenía cinco surcos de presión, lo que evidencia que la causa de muerte fue por asfixia mecánica. Tenía, además, golpes contundentes y hematomas en antebrazos y piernas que evidenciarían signos de defensa, así como hematomas en la cara, debajo de los ojos y en la lengua. Todo esto demuestra el grado de violencia que usó John Nelson Poulos para asesinarla.

2. Las huellas y la cinta: la cinta adhesiva con la que se envolvió la maleta en la que John Poulos introdujo el cuerpo de la joven DJ, la cual le fue encontrada al momento de su deportación en Panamá, y, por supuesto, las huellas dactilares que se hallaron en la banda pegada sobre la maleta. Estas corresponden al estadounidense, como lo demostró un informe de dactiloscopia.

3. Los seguimientos: fueron cientos de horas de cámaras de seguridad lo que permitió demostrar que fue John Poulos la última persona en estar con Valentina Trespalacios, en compartir con ella, evidenciar que ambos ingresaron al apartamento en el norte de Bogotá, del cual él huyó y ella salió muerta, además de cómo entró la maleta con el cuerpo en el baúl del carro, el recorrido que hizo, el momento en el que la arrojó en el contenedor de basura y su huida al aeropuerto El Dorado.

4. Los testigos y la teoría de los celos: la mamá de Valentina, la señora Laura Hidalgo, las amigas de la DJ, entre otros, dieron cuenta del control que pretendía ejercer el extranjero sobre la joven. Como lo describió el juez del caso, Valentina tenía que informarle cada una de las actividades que hacía o este se molestaba, hasta el punto de contratar un investigador privado para vigilarla.

Así fue la audiencia en la que condenaron a Poulos

“Yo a ella la amaba. Había estado con ella nueve meses, había hablado con ella todos los días, imagínese matar a alguien a quien uno ama”, esas palabras marcaron un antes y un después en el juicio que se adelantaba contra John Poulos. Desde ahí surgió la teoría de una muerte accidental en medio de juegos sexuales, hipótesis que fue derribada por la Fiscalía.

"Si hubiese sido, hipotéticamente, un homicidio culposo, pues seguramente no tendría chichones en la cabeza, hematomas en los brazos, antebrazos, en la región sacra y en alguna de sus extremidades. De hecho, tenía raspaduras”, mencionó el juez Guillermo Adame.

Durante la lectura que hacía el togado, John Poulos solo frotaba su cabeza, tomaba sorbos largos de agua y escuchaba.

Lo que ocurrió el fin de semana de la muerte de Valentina quedó registrado en videos de cámaras de seguridad. La prueba era contundente: allí se evidenció cómo llegó la pareja el 20 de enero del año pasado a hospedarse en lo que sería su nuevo hogar. Luego, tras algunos días de fiesta, se les vio el sábado 21 de enero recibiendo domicilios. Sería esta la última imagen con vida de la joven, el 21 de enero a las 10:43 de la noche. Lo siguiente que se observa es a Poulos ingresando al apartamento con un carro de mercado al siguiente día, a las 9:00 de la mañana.

Soo le bastaron diez minutos para introducir la maleta con el cuerpo de Valentina en el carro de mercado y bajarla al sótano, donde la escena es clara: Poulos usando toda su fuerza para ocultar el cuerpo de la joven de 21 años en el baúl del carro y salir huyendo sin ningún tipo de contemplación. La abandonó en un contenedor de basura en Fontibón.

“Aquí lo que se evidencia es que esas heridas permiten concluir que Valentina Trespalacios fue brutalmente golpeada, reducida físicamente en forma severa y subyugada por un hombre que minimizó a Valentina”, expresó Santiago Vásquez, fiscal del caso.

Al otro lado del atril se encontraba la mamá de Valentina Trespalacios, Laura Hidalgo, quien reflejaba en el rostro el dolor de una madre que nunca más verá a su hija, dolor al que John Nelson Poulos fue indiferente y, por el contrario, contestó así: “No recuerdo nada después de tener sexo o mientras usaba los juguetes sexuales con ella. Nunca agrediría a nadie en mi vida, o a nada, o a ningún ser vivo. Cualquier cosa que pudo haberle ocurrido a ella pudo haber sido mi cuerpo, pero no era mi mente, no era mi intención”.

El juez que condenó a Poulos a más de 42 años de cárcel le cuestionó su memoria selectiva y dijo que gracias a las pruebas recaudadas por la Fiscalía se logró reconstruir lo que pasó y determinar que Valentina Trespalacios falleció a manos de quien fuera su pareja sentimental.

>>> Le puede interesar: Juez ante descaro de John Poulos: “No sé por qué lo niega, si es tan evidente"