Imágenes de una cámara de seguridad captaron cómo un sujeto se robó tres contadores de agua en cuestión de minutos en el barrio J. Vargas, localidad de Engativá, occidente de Bogotá. El hurto duró solo 2 minutos y 40 segundos. No contento con esto, al otro día regresó y se robó los de la otra cuadra.
Raúl Hincapié, residente del sector, afirmó que solo en ese barrio, “en el último mes, de 35 a 40 contadores se han robado”.
Fabián Santa López, gerente de servicio al cliente del Acueducto de Bogotá, reveló que "durante 2023 llevamos el orden de 9.615 medidores reportados como hurtados en la ciudad. Se han reportado en todas las localidades; sin embargo, las tres localidades con mayor índice de robo son: San Cristóbal, Kennedy y Engativá".
Es decir que se hurtan alrededor de 2 contadores de agua por hora y unos 50 por día.
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Lo más grave con el robo de contadores de agua es que afectan el bolsillo del propietario de la vivienda, ya que el dispositivo "tiene un valor de alrededor de 210 mil pesos el cual es facturado a los usuarios y puede ser financiado dependiendo de las necesidades del usuario", señaló el funcionario.
Sin embargo, Margareth Peña, una de las afectadas por los hurtos, dice que el costo asciende a unos 400 mil pesos, porque además de “la puesta del contador, hay otros costos adicionales porque cuando los hurtan el agua sale y uno es el que resulta pagando el escape del agua y también toca pagar que venga la persona del Acueducto a hacer la instalación”.
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Para solicitar la instalación de un nuevo contador debe comunicarse con la línea 116, en la que también puede denunciar el robo. No obstante, tenga cuidado, ya que "existen bandas organizadas para engañar a los usuarios y hacerse pasar por funcionarios de la empresa y en algunos casos solicitan que van a retirar los medidores", indica la misma empresa del servicio público.
Los ciudadanos piden mayor acción de la empresa de Acueducto, y se preguntan “¿por qué al instalar el medidor no tienen la precaución y aseguran eso? Eso es una mafia. El que vende sabe que alguien le va a comprar eso”.
“Entonces señores Acueducto, señores Policía, colabórennos, estamos cansados de tanto robo”, sostienen.
El cambio del medidor debe hacerse en 24 horas para el caso de Bogotá.