Gustavo Adolfo Agámez, de 23 años, fue enviado a una prisión en Montería luego de que el juez 16 penal municipal de garantías determinara que era un peligro para la sociedad tras el presunto asesinato de Juan Esteban Alzate, de 15 años, a quien habría apuñalado en un bus de Transmilenio.
El abogado penalista Saúl León detalló que el presunto homicida “negó su responsabilidad en los hechos, pese a que existen abundantes elementos materiales probatorios, entre ellos una interceptación telefónica que lo compromete en la cual él le reconoce el homicidio a su padre”.
También fueron determinantes los videos de cámaras de seguridad en Transmilenio, claves para identificar a Gustavo Adolfo Agámez. Las imágenes fueron captadas a las 10:30 de la noche del sábado 8 de octubre.
Gustavo Adolfo Agámez subió al Transmilenio en compañía de una mujer y un bebé de brazos. Hasta ese momento era un testigo más de la discusión que sostenía el joven de 15 años con un hombre de buzo de capota a quien por accidente pisó en un pie.
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Un minuto y 40 segundos después de haber abordado el bus, Gustavo Adolfo Agámez llevó su mano a la cintura y sacó una navaja.
“En el momento en que la víctima se encontraba totalmente desprevenida, en estado de indefensión, sin mediar palabra alguna, usted esgrime esa arma blanca en contra de la misma a la altura del pecho, la cual le causa una herida en la región hemitórax izquierda”, relató el fiscal del caso.
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“En ese momento se detiene el biarticulado en la estación CDS de la carrera 32, donde sale usted en compañía de su compañera sentimental y un menor sin ser capturado; en todo momento en su huida, usted empuñaba esa arma blanca con la cual presuntamente lesiona al menor J.E.A.C.”, agregó.
La cámara de seguridad captó el momento en que un auxiliar bachiller de la Policía intentaba detener al hombre de buzo de capota que era señalado por algunos usuarios de haber atacado a Juan Esteban; sin embargo, otros pasajeros apuntaban a Gustavo Adolfo Agámez, quien saltó de la estación en Bogotá y huyó tras presuntamente haber asesinado a un joven cuyo único pecado fue haber pisado por error a otra persona.
Francisco Barbosa, fiscal general, detalló que el señalado homicida “se escapó a Medellín y posteriormente se trasladó a Montería, donde fue ubicado y capturado por el equipo investigador”.
La madre de Juan Esteban, Mayerli Ceballos, pide una condena ejemplarizante para el asesino.
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“Yo sé que con él estar en la cárcel 50, 60 años, no me va a devolver a mi hijo, pero la verdad él tiene que irse con una pena máxima, sin ningún beneficio”, sostuvo.
Las autoridades también buscan a una mujer y tres hombres que participaron en la pelea que acabó con la vida del adolescente de 15 años.
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