Durante cuatro años, investigadores de la Dijín de la Policía le siguieron la pista a un violador que huyó del país antes de ser condenado por el abuso sexual
de una niña en un colegio privado de Bogotá. Gracias a la agencia estatal Marshall de los Estados Unidos, el sujeto fue capturado y deportado a Colombia para cumplir su pena, que fue impuesta en febrero de 2022.
Se trata de Johann Camilo Siabatto Cardona, quien fungía como docente de un plantel educativo en 2017, año en que abusó de una menor de edad en repetidas ocasiones, según consta en el fallo judicial.
Su madre se dio cuenta de los abusos cuando se encontraba de vacaciones con la niña, pues vio que el violador le envió a la estudiante una foto de su miembro “preguntándole que si quería tener sexo oral”, señala la sentencia.
El 15 de febrero del 2022 se emitió una condena de 174 meses, 16 años y medio de cárcel, contra el profesor, que en ese momento se encontraba en Estados Unidos.
“Esta sentencia no fue recurrida por ningún sujeto procesal y por lo tanto tiene firmeza, no hubo recurso alguno”, precisó Jonathan Morantes, representante de la víctima.
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“Fueron siete años esperando que se resolviera todo el proceso, fueron momentos donde algunos docentes, algunas estudiantes, nos daban información, que el condenado se había trasladado para Miami, luego hacia New Jersey y luego se había regresado a Miami. Fueron seguimientos que se fueron dando y afortunadamente el día de hoy ya podemos contar con que se encuentra en Colombia y va a iniciar a pagar su condena”, recalcó Edwin Córdoba, padre de la menor abusada.
“El 31 de julio de 2023 lo capturan. Él interpone un recurso contra esa extradición y esta semana le resuelven y finalmente deciden extraditarlo a Colombia para que pague el delito que cometió acá”, precisó el abogado Morantes.
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En un video grabado en el aeropuerto El Dorado por la misma familia de la víctima del violador, cuando fue deportado a Colombia, se escucha a Jenny Barrantes, madre de la joven, decirle a su hija: “Mira, mamacita, ya. Capítulo cerrado, mi amor. Justicia”.
Esta mujer le agradeció “a todas las personas que nos ayudaron, desde la Policía Internacional, Marshall, todas las personas que nos ayudaron. Igualmente, en el aeropuerto todas las personas nos brindaron la información para que él también estuviera aquí y pudiera pagar esa condena”.
“Mi hija sana porque fue valiente en su momento cuando denunció y de alguna manera sanamos todos porque sabemos que es un delito que no queda impune”, agregó.