Cientos de ciudadanos tuvieron que caminar a sus casas en municipios aledaños a la capital. Superintendencia de Transporte evalúa sanciones.
En Bogotá, esta jornada registró desde temprano, actos de vandalismo, bloqueos y enfrentamientos. Más de 67 vehículos vandalizados en la capital, 38 de ellos de Transmilenio. Además, varios carros terminaron pinchados en la mitad de la vía y esto generó caos en el tráfico.
Algunos manifestantes intimidaron a conductores de buses y bajaron a los pasajeros.
En contexto: A pie se movilizan decenas de afectados en Soacha y Bogotá por amenaza de paro de conductores
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En Soacha, uno de los municipios más afectados, los ciudadanos trataron de salir en camiones, carros particulares y hasta motos.
Los servicios de transporte privado excedieron el costo promedio, por lo que los trayectos llegaron a costar hasta 50.000 pesos. Dicha situación obligó a más de uno a caminar por horas.
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En los municipios como Chía, Cajicá o Tabio no se presentaron desórdenes, pero los buses intermunicipales no prestaron servicio, lo que bloqueó la movilización de los habitantes de esas zonas.
Por otro lado, la protesta sí tocó a Funza, Fusagasugá, Zipaquirá y Cajicá, donde se difundieron mensajes a través de las redes sociales que crearon pánico.
El detonante de la jornada fue la inconformidad de los conductores ante la suspensión de licencias de conducción por seis meses cuando hay reincidencia en las infracciones. El líder de la movilización, Hernando Chávez, indicó que “esta norma está muy atrasada, porque esta es una ley del 2002. Estamos a 2019, todo ha cambiado. El tráfico en Bogotá y todas las ciudades está muy diferente”.
Entre tanto, la Superintendencia de Transporte anunció que investigará a empresas y conductores que afectaron la prestación del servicio y considera efectuar multas y hasta cancelación de permisos de operación.
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