Katerine Motiva Benavides es uno de esos rostros del gran reto de muchas mujeres durante la pandemia: sacar a su familia adelante en medio de la crisis.
“Yo creo que toda esa frustración se está viendo en este momento, saber que trabajas y trabajas y el dinero no te alcanza.. se ha vuelto un caos”, dice ella.
Pero es a partir de esa frustración y haciéndole honor a su apellido que Maritza se motivó sin pensarlo dos veces a montar un puesto de ‘guanabanazo’ en las calles del barrio Álamos, en el noroccidente de Bogotá.
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“Hay que costear tiquetes, manutención, muchas otras cosas. Es mi única hija y hay que aprovechar la oportunidad que se dio para que ella pueda salir a estudiar, por ahí dicen que uno por lo hijos hace lo que sea”, afirma.
Su hija, asegura Katerine, con la inteligencia que le heredó, se ganó una beca en Rusia y ella está haciendo maromas para costear sus gastos.
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¿Por qué lo hace?
“Por el amor que la tengo a ella, por verla crecer, por verla todo una profesional, por verla con más oportunidades que yo tuve en algún momento”, cuenta.
Y como a muchas otras mujeres colombianas, la agobian los momentos duros, en los que la frustración camina por su almohada.
“A veces hay días que uno se levanta y dice, de pronto eso no era lo que yo quería para mí; no hay nada más que hacer”, cuenta.
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La tarea diaria es ardua y mucho más en la calle.
“Estar en la calle es pesado, el tema del clima, aguantar gente que no le gusta lo que está vendiendo, no le gusta el producto; es pesado”, reitera.
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Según el DANE, la brecha entre hombres y mujeres se incrementó en pandemia en un 6%, las tareas del hogar siguen recargadas en la mujer y mucho más durante la emergencia sanitaria.
“Las mujeres han visto exacerbada las responsabilidades de las tareas del hogar, es decir, dejar de buscar empleo”, reconoce Iván Jaramillo, director del Observatorio laboral de la Universidad del Rosario.
Katerine trabaja con tesón para poder cumplirle el sueño a su hija, pero busca nuevas oportunidades laborales que le permitan una mejor calidad de vida.