El eje central del Plan Marshall para Bogotá, aprobado por el Concejo de la capital de la República el pasado fin de semana, es el de dar alivios e impulsos tributarios y financieros para salir de manera acelerada de la crisis que deja el coronavirus COVID-19 .
“Un restaurante, un hotel o un negocio, que hayan visto reducido la demanda o sus ingresos, pues este año están pagando poquito o nada del impuesto de industria y comercio. El próximo año, cuando las cosas estén mejor, van a tener un descuento de hasta el 25 % si sus ingresos cayeron más del 50 %”, indicó Juan Mauricio Ramírez, secretario de Hacienda de Bogotá.
El plan también incluye un ambicioso proyecto de formalización laboral. Estas empresas solo pagaran el 100 % del impuesto de industria y comercio en 6 años.
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“Con una ayuda, que les va a dar la Administración, los podemos ayudar a formalizarse, a tener acceso a créditos, a ayudarles en las condiciones para hacer empresas formales y apoyo técnico”, anotó Ramírez. (LISTA)
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Acopi, el gremio que reúne a los pequeños empresarios, plantea, además, una alternativa para impulsar la producción de este sector de la industria.
“La reactivación de la demanda a través de compras públicas para las micro, mediana y pequeñas empresas, y la reactivación o el fomento de los encadenamientos productivos, especialmente los del sector manufacturero colombiano”, dijo Alejandra Osorio, presidenta de Acopi Bogotá.
El plan Marshall para Bogotá tendrá un costo de medio billón de pesos y, además de reactivación, incluye ayudas como el congelamiento del impuesto predial para un poco más de dos millones y medio de personas. La iniciativa se financiará con impuestos que empiezan a recaudarse desde el 2021.
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