Cerrado, así permaneció una parte del comercio de Bogotá en zonas como Usme, Rafael Uribe, Suba, Ciudad Bolívar y Kennedy.
La razón de esta decisión fueron los mensajes intimidantes que recibieron varios comerciantes en las que advertían que en caso de abrir los negocios, en medio del paro, tendrían que atenerse a las consecuencias.
“A todos nos amenazaron que no podíamos abrir, personas desconocidas que no sabemos quiénes eran, y nos amenazaron que si abríamos nos ateníamos a las consecuencias, nuestra integridad física y nuestros establecimientos”, señaló Jorge Duarte, comerciante y líder social.
“El temor de nosotros era porque supuestamente él que abriera le saqueaban el negocio y por ese motivo no abrimos”, expresó Jorge González, víctima.
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Los comerciantes aseguraron que en algunos casos las intimidaciones se hicieron puerta a puerta por personas que se movilizaban en motos o vehículos.
“Pasaron los bandidos el día de ayer prohibiendo a las droguerías, a los negocios vitales como supermercados, tiendas de víveres, panaderías, prohibieron trabajar”, manifestó un ciudadano.
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La intimidación fue tal que algunos comerciantes tuvieron que vender a puerta cerrada solo por las ventanas.
“Nos tocaba golpear por las ventanas para que nos vendieran lo que íbamos a comprar y ellos no querían porque les daba miedo que les quemaran el negocio”, indicó Carmen Garzón, habitante del sector.
Fenalco, el gremio que agrupa a los comerciantes, hizo un llamado urgente a las autoridades, pues la situación se presentó en varias localidades de la capital.
“A los comerciantes, a los pequeños tenderos, a los panaderos a las personas de papelerías pequeñas de los diferentes barrios les están llegando unas notas a sus teléfonos personales donde les dicen que son de las FARC, no sabemos si esto es cierto o falso, pero los amenazan y de esta manera los intimidan para que no abran sus establecimientos comerciales”, detalló Juan Esteban Orrego, director de Fenalco Bogotá-Cundinamarca.
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“Hubo tres establecimientos: un autoservicio, dos panaderías que fueron abrir y los hicieron cerrar, esto es inaudito”, dijo Duarte.
En algunos sectores de Usme, el Gaula de la Policía hizo presencia garantizando la seguridad de los comerciantes y dando un parte de tranquilidad para que abrieran sus negocios.
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