Este miércoles en una nueva jornada del ‘madrugón’, en el sector de San Victorino, en el centro de Bogotá, se registraron aglomeración e incumplimientos a medidas tan importantes frente al COVID-19 como las del distanciamiento social y el uso del tapabocas .
Néstor García, director de Convivencia y Diálogo de la Secretaría de Gobierno, explicó que, pese a que “tenemos un pacto de operación y de funcionamiento” en el que hay una base de 600 vendedores informales, “hoy tenemos presencia de más de 1.200”.
Para ubicar a 140 de estos comerciantes, la Alcaldía adecuó una alameda con el fin de evitar concentraciones multitudinarias, pero ellos aseguran que el espacio no les favorece.
“En este lugar que ven todos hacen sus deposiciones, no tenemos luz, no tenemos agua”, señala Nidia Hernández, vendedora informal.
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Ante estas imágenes de aglomeraciones, autoridades advierten que hay un grave riesgo para la salud durante estos días, en los que se busca reactivar el comercio en medio de la lucha contra el COVID-19.
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