CAR sugiere a Alcaldía de Bogotá no levantar racionamiento de agua: cuál es el nivel de los embalses

Alfred Ballesteros, director de la la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR),manifestó recientemente que es recomendable mantener la prudencia a la hora de fijar plazos para levantar la medida de racionamiento de agua en Bogotá y los municipios aledaños. Lo anterior, debido a que los embalses aún no han logrado una recuperación significativa que pueda mantener la demanda de los consumidores.El director dijo que si bien las lluvias recientes han mejorado levemente el nivel de los embalses que abastecen al centro del país, todavía se registran descargas en la cuenca alta del río Bogotá de 7,5 metros cúbicos por segundo que indican que varios embalses mantienen bajo nivel y una tendencia decreciente. Y es que algunos embalses, tal como explica la CAR, mantienen un nivel preocupante. Incluso, explica la corporación, algunos depósitos de agua como Tominé podrían tardar hasta tres años en llenarse por completo. Por lo anterior, el director de la entidad aseguró que se debería evaluar la medida de levantar el racionamiento de agua solo cuando los embalses estén por encima de su 50 por ciento.“Es conveniente esperar a que se consolide realmente la primera temporada de lluvias del mes de abril y solo cuando los embalses estén por encima del 50 por ciento se podría revisar esta medida”, explicó el director Ballesteros.Estas declaraciones las hace el director luego de que, en los últimos días, la gerente de la Empresa de Acueducto y Alcantarillado de Bogotá, Natasha Avendaño, y el alcalde e la capital, Carlos Fernando Galán, dieran a conocer que se estaba evaluando la posibilidad de eliminar esta medida en las próximas semanas. "Si la tendencia se mantiene, a lo largo de los próximos 15 o 20 días estaremos muy cerca de levantar el racionamiento definitivamente", dijo en su momento el alcalde de Bogotá a Red+.¿Por qué continúa el racionamiento de agua si en Bogotá sigue lloviendo?El director Ballesteros explicó que, aunque ha llovido intensamente en Bogotá durante las últimas semanas, esto no ha ocurrido de la misma manera en las microcuencas abastecedoras de los embalses. Como si esto fuera poco, con lluvia o sin lluvia se siguen consumiendo cerca de 17 metros cúbicos por segundo de estas represas, lo que se traduce en un consumo cercano a un millón y medio de metros cúbicos por día que, sin un alto nivel de precipitaciones, no reflejaría aumentos considerables en la ocupación de estos embalses.“No basta con que llueva, pero si no llueve lo suficiente para que podamos almacenar un millón y medio de metros cúbicos diarios no estamos compensando lo que estamos extrayendo de los embalses y esta es la razón por la cual la tendencia sigue siendo descendente a pesar de que en los centros urbanos de Bogotá y la Sabana, tengamos las calles inundadas”, añadió el director.Por el momento, la CAR manifestó que continúa avanzando en la implementación de medidas alternativas para enfrentar esta crisis de desabastecimiento de agua en el centro del país, tales como hacer el respectivo llamado a entidades territoriales y empresas de servicios públicos para invertir en recuperación de ecosistemas, compra de predios o trabajos articulados con las autoridades. “Avanzamos en procesos de restauración participativa con esquemas como acuerdos de conservación y pago por servicios ambientales (PSA), así como el aprovechamiento de aguas lluvias y en la exploración de sistemas alternos como las aguas subterráneas, el reúso de las aguas negras y grises, la aplicación de criterios de la economía circular no solo en las industrias, sino también en la cotidianidad de nuestros hogares”, dijo Ballesteros."El desabastecimiento hídrico es un problema que no va a acabar porque tengamos 2 meses de lluvia"Finalmente, el director de la CAR hizo la invitación para buscar soluciones estructurales a este desabastecimiento de agua, más aún teniendo en cuenta que el cambio climático podría hacer más comunes estos tipos de crisis en diferentes regiones del país. "El desabastecimiento hídrico es un problema que no se va a acabar porque tengamos dos meses de lluvia o porque los embalses suban, por lo que se hace necesario entender que estamos enfrentando una nueva realidad generada por el cambio climático y que tenemos que articularnos para construir soluciones de mediano y largo plazo”, cerró Ballesteros.JULIÁN CAMILO SANDOVAL NOTICIAS CARACOL DIGITALEN INSTAGRAM COMO: @JULIAN_SANDOVL