En una de las operaciones más importante de los últimos años, la Policía de Bogotá logró desarticular una peligrosa banda delincuencial denominada Los Camilos.
Según las autoridades, Los Camilos eran los amos y señores del narcotráfico y microtráfico en al menos tres localidades de Bogotá -Kennedy, Bosa y Tunjuelito- y también en el municipio de Soacha.
Eran los dueños de la droga que se vendía en por lo menos 60 barrios de la capital de la República y, mensualmente, podían mover hasta 2.100 millones de pesos.
Los Camilos son señalados de cometer 20 homicidios y habrían participado en 30 más. Son señalados también a matar a rivales de otras ollas de microtráfico en la ciudad.
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Además, tendrían sueldos por sus crímenes. Por ejemplo, los encargados de la venta de estupefacientes y también asesinatos podían ganar hasta más de 4 millones de pesos mensuales.
Hubo seguimientos en lo que las autoridades también descubrieron que usaban bicitaxis para delinquir. Allí transportaban las drogas y armas simulando ser personas comunes y corrientes utilizando ese servicio público.
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La Policía capturó a 18 de Los Camilos tras una investigación de más de un año.