Barrios de Bogotá que menos agua han consumido durante el racionamiento: ¿está el suyo?

El racionamiento de agua en Bogotá ha sido una medida crucial para enfrentar la preocupante escasez de este recurso. A pesar de los esfuerzos, la crisis persiste, por eso algunos barrios han demostrado un consumo responsable.

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Consumo de agua en Bogotá

Desde el inicio del racionamiento, la Alcaldía de Bogotá y la Empresa de Acueducto y Alcantarillado de Bogotá (EAAB) han evaluado diversos factores para determinar la necesidad de mantener, ajustar o intensificar la medida. Entre estos factores se encuentran los niveles de consumo, la situación de los embalses, las precipitaciones registradas y las proyecciones hidrológicas.

Barrios ejemplares

A pesar de la crisis, algunos barrios se han destacado por su bajo consumo de agua. Estos son:

1. Fontibón, Hayuelos: esta localidad ha demostrado un uso responsable del recurso hídrico.
2. Bosa, El Recreo: otro ejemplo de ahorro de agua en medio de la escasez.
3. Suba, Mirandela: este barrio ha adoptado medidas como reducir el tiempo en la ducha y reutilizar agua.
4. Usaquén, Alcalá: una comunidad comprometida con la conservación del agua.

El camino a seguir

Aunque algunos barrios han sido ejemplares, la crisis no ha terminado. El consumo promedio de agua se sitúa en 15,91 m³ por segundo, mientras que el nivel de embalses en Chingaza alcanza solo el 21,02%. El alcalde de Bogotá, Carlos Fernando Galán, insta a seguir trabajando para reducir el consumo hasta llegar a 15 m³ por segundo. Las lluvias ayudan, pero la responsabilidad ciudadana es clave para superar esta crisis.

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Funcionamiento del racionamiento de agua en el primer mes

Durante el primer mes de racionamiento de agua en Bogotá, se han observado resultados mixtos. Algunos de esos aspectos son:

1. Reducción del consumo: en general, ha habido una disminución en la ciudad. Los barrios han respondido adoptando medidas de ahorro y concienciación.
2. Desafíos persisten: a pesar de los esfuerzos, algunos sectores aún no cumplen con las metas de ahorro. La EAAB ha intensificado la supervisión y aplicado sanciones a quienes incumplen.
3. Impacto en los embalses: aunque el racionamiento ha aliviado la presión sobre las represas, la situación sigue siendo crítica. El Chingaza, por ejemplo, está por debajo del 25% de su capacidad.
4. Lluvias y proyecciones: han sido un factor positivo, pero las hidrológicas indican que se necesita mantener la medida para evitar un colapso en el suministro.

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