El 3 de octubre de 2020 la vida de Árnold Toro y su familia cambió para siempre. Aquel joven amante del reggae fue víctima de delincuentes que le dispararon en la cabeza.
Eran las 8:33 de la noche cuando Árnold regresaba de trabajar. En el momento en que iba a entrar a su casa, los criminales en bicicleta lo atacaron por robarle el celular. Un proyectil se alojó en la nuca de Árnold y lo dejó cuadripléjico y sin ninguna posibilidad de volver a caminar, según le dijeron los médicos que ese día lo atendieron.
A través de Noticias Caracol, Colombia conoció a Árnold postrado en una cama y dependiendo de otros para moverse. Hoy, tras un intenso tratamiento por parte de la clínica Biomedical, puede caminar. Su recuperación ha sido sorprendente.
“Es como volver a nacer, ya le cambia a uno la vida por completo, aprende a valorar más, me siento mejor, incluso mucho mejor que como estaba antes del accidente”, afirma Árnold.
Tras permanecer 20 días hospitalizado no se rindió, y sus deseos de volver a caminar y hasta correr son ya una realidad.
Y no solo ha sanado su cuerpo, también su corazón. Esto dijo acerca de los delincuentes que le dispararon en la cabeza por un simple celular:
La verdad trato de no pensar mucho en ellos. Sí le pido a Dios que les cambie la mentalidad de lo que están haciendo, ya depende de Él, de mi parte ya los perdoné hace rato
Su experiencia ha servido para alejar pensamientos poco positivos y demostrarles, a quienes creyeron que la vida había terminado, que estaban equivocados. Hoy es, además, inspiración para otros que pasan por situaciones similares.
Una de ellas es Laura, la menor de 15 años que recibió un disparo cuando le robaron su celular, también en Bogotá. A ella la visitó en la clínica para acompañarla en su proceso de rehabilitación.
“Si yo pude, tú puedes, y voy a estar contigo en este proceso hasta que estés de pie como estoy aquí”, le dijo Árnold a la menor.
Para Laura, contar con Árnold es una motivación en ese empeño que tiene de volver a caminar y bailar, que es lo que tanto le apasiona.
“Sí se puede, te tienes que mentalizar porque si no se mentalizan no van a poder, eso es lo más importante del proceso”, señala ella.
Árnold les devolvió la fe y la esperanza a los padres de Laura después del trágico día en el que ella recibió un disparo.
“Es muy alentador mirar una persona así y con un testimonio muy bonito, y si él pudo, mi hija también va a poder”, expresa don Jesús, papá de Laura.
“Al Canal Caracol de verdad muchas gracias porque, nunca me voy a cansar de decirlo, fue el primero que me ayudó”, dijo por su parte Lilian Betancur, mamá de Laura.
Árnold le enseñó al país que la vida puede cambiar en un suspiro, que cualquier persona puede estar a merced de la delincuencia que arrebata vida y sueños por un celular, pero también que todos somos capaces de levantarnos más fuertes.
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