La más reciente alerta electoral de la Defensoría del Pueblo advierte la presencia de grupos armados organizados en las grandes ciudades, una de ellas es Bogotá, donde cinco localidades están en riesgo extremo, como es el caso de Ciudad Bolívar, donde las amenazas se dispararon.
“Sí sentimos miedo por nuestras vidas, un llamado al presidente Petro, que no nos deje matar”, expresó un líder social amenazado.
En diálogo con Noticias Caracol, a este ciudadano se le quebró la voz y se le aguaron los ojos, pues sabe que carga una cruz en su espalda.
Pero ni las tres amenazas de muerte, ni el intento de secuestro, ni la golpiza por parte de encapuchados a una cuadra de su casa, ni la decena de advertencias, atormentan tanto a este líder social de 70 años como la amenaza que lleva escritos los nombres de sus seis hijos y su esposa.
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“Nos dicen sapos, van a aparecer despedazados y embolsados los cuerpos de ustedes en Ciudad Bolívar, y después nos mandan la corona fúnebre, que la recoge el mismo coronel de la Policía”, señaló el ciudadano.
Quienes amenazan a este hombre se autodenominan como Clan del Golfo, también conocidas como Autodefensas Gaitanistas, quienes de un día para otro inundaron barrios de Ciudad Bolívar, difundiendo miedo a través de videos portando fusiles en la localidad.
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“Lo que me informa la Policía de Bogotá y también la inteligencia es que descartamos que haya presencia de grupos armados organizados en la ciudad”, señaló el general William Salamanca, director de la Policía Nacional.
Aunque las autoridades descarten la presencia de este grupo armado en Bogotá, para la Defensoría del Pueblo es claro que operan a manera de outsorcing, contratando a grupos locales que conocen los barrios, las dinámicas de la comunidad y a los que no hay que armar porque ya están armados hasta los dientes.
Ricardo Arias Macías, director de alertas tempranas de la Defensoría del Pueblo, se pronunció al respecto.
“Este fenómeno hay que entenderlo como uno que ha mutado. Esto no es igual a como se podía leer en 2016 o 2017, esto se ha sofisticado en una manera de organización criminal”, dijo.
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Ser líder social es una actividad de altísimo riesgo en un país donde en promedio asesinan un líder cada dos días. En Ciudad Bolívar, en 2021, amenazaron a 18 líderes; en 2022, a 42, y en lo que va de este 2023 ya se registran 57.
A otra líder social, hombres encapuchados la encañonaron con pistola en la cabeza a plena luz del día en una reunión barrial.
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“Ellos lo que hacen es maltratarnos, amenazarnos y sacarnos, además ellos quieren apoderarse”, dijo.
Como en otras zonas del país en Ciudad Bolívar hay fenómenos como extorsiones, trata de personas, conflicto de tierras, pero tiene algo más que hace a esta localidad atractiva para grandes estructuras criminales: es la ruta de entrada desde el sur del país hasta la capital.
“Por allí se puede empezar a traficar armas e insumos que hacen parte de los eslabones de la producción de estupefacientes a la capital del país”, agregó Ricardo Arias Macías.
Un coctel de violencias que se exacerba en medio de la paz total, donde los grupos armados buscan presionar, mostrar su dominio y fortalecimiento de cara a las mesas de diálogo con el Gobierno.
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