La alcaldesa Claudia López y el ministro de Salud, Fernando Ruiz, tuvieron un rifirrafe en Twitter donde la mandataria dijo que se sintió agredida la con "soberbia" por parte del funcionario, mientras que el alto cargo criticó su “unilateral exigencia”.
La manzana de la discordia en este caso fue la distribución de las vacunas contra el coronavirus de Sinovac.
Aquí el contexto:
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La molestia de la alcaldesa de Bogotá radica en que en la capital pasaron tres días desde que terminó el proceso de inoculación de las primeras 12.582 vacunas, antes de conocer cuántos biológicos le corresponderían del lote que llegó el pasado sábado.
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Hasta el momento las dosis que han llegado a la capital representan solo el 0,3% de las que requiere la ciudad para conseguir la vacunación necesaria.
Según el secretario de Salud de Bogotá, Alejandro Gómez, la información sobre adultos mayores se entregó a tiempo e insistió que la ciudad está lista para iniciar el proceso de vacunación en esta población.
En medio del enfrentamiento surgió otra pregunta: ¿qué está haciendo la administración de Claudia López paralelamente mientras llegan las vacunas para evitar un tercer pico?
El médico salubrista Luis Jorge Hernández señaló que “hemos notado una disminución en los tamizajes que viene haciendo Bogotá. Llegó a alcanzar, en enero 20, 22 mil tamizajes diarios y ha bajado a menos de 10 mil, 8 mil, 7 mil. Es importante que se conserven los tamizajes diarios por encima del 20 mil o más”.
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“Independientemente de la vacunación, no se puede bajar la guardia en esto y es la clave para que no haya tercera oleada pandémica”, añadió.
Los médicos también piden controles para evitar aglomeraciones y que se apliquen correctamente medidas como el uso del tapabocas, la distancia social y el aforo en lugares cerrados, medidas que se han incumplido en algunos lugares de la ciudad.
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