En el municipio de Santa Rosa, sur de Bolívar, hubo un traqueteo de fusiles que hizo huir a la población de forma despavorida
. Video aficionado muestra cómo hombres, mujeres y niños se esconden detrás de un barranco por el temor de que alguna bala perdida los alcance.
Mientras el dueño de una tienda del caserío ubicado en la serranía de San Lucas baja la reja, los primeros en ponerse a salvo se ocultan en la casa del lado.
El intercambio de tiros cada vez se torna más fuerte. Otro grupo de personas apareció en escena y se evidenció cómo los adultos protegían a los niños para que no cayeran en el fuego cruzado.
Esta balacera se dio entre el ELN y el Clan del Golfo, a quienes no les importa la población civil.
Lo que siguió fue el desplazamiento masivo, ya se contabilizan 556 familias huyendo entre trochas, riachuelos y las montañas buscando protección en San Luquitas, a donde mujeres y niños suben en camionetas rumbo al casco urbano del municipio de Santa Rosa.
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La Defensoría del Pueblo exige acciones ante este tipo de situaciones, que se han presentado en otras partes de Colombia.
“Se hace necesario que las instituciones, las gobernaciones y las alcaldías tomen las medidas urgentes y necesarias, que permitan atender a estas familias en condición de desplazamiento”, señaló Didier Rodríguez, representante de la entidad en el Magdalena Medio.
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Si en el norte de Colombia llueve, en el sur no escampa. Tropas del Ejército, que recientemente se enfrentaron a las disidencias Jaime Martínez en zona rural del corregimiento de Timba, Cauca, fueron expulsadas por la población.
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