El viento terminó jugándole una mala pasada a las autoridades en Bello, Antioquia, mientras realizaban la destrucción de tonelada y media de marihuana. El olor y los efectos del psicotrópico terminaron afectando a cientos de vecinos a las instalaciones de un batallón militar donde se realizó la quema. Mientras trabajaba, Edilberto, obrero de una construcción, notó que desde la zona boscosa, contigua a su trabajo, se levantaba un particular olor.
“Se sintió una humarada muy horrible que salía de ahí del batallón, del Pedro Nel Ospina, y un olor a marihuana tremendo que trababa a todo el mundo”, contó Edilberto Castaño.
El olor a cannabis provenía del batallón militar Pedro Nel Ospina, lugar en el que Policía y Fiscalía quemaron tonelada y media del alcaloide. Lo que no previeron las autoridades fue que el viento se iba a llevar el humo de la marihuana y sus efectos a los barrios vecinos.
“Muy mareado, muy embobado, toda la tarde. Le toca a uno seguir trabajando, pero como muy embobado, uno que no está acostumbrado a esas cosas, como dicen, el pasivo es el que sufre más”, expresó Robinson Sepúlveda.
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La marihuana fue incautada en el sector de El Mirador, en Bello, y presentada en rueda de prensa por la Policía. Ante lo sucedido, Noticias Caracol contactó el comando de institución en Medellín, pero no hubo una respuesta oficial.
“Eso no debiera de hacerse por aquí. ¿Cómo afectaría a esa gente de Norteamérica, que toda la brisa de por la tarde daba era para allá, para arriba?”, exclamó Castaño.
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Según la Alcaldía de Bello, no hubo reportes, ni en centro de salud ni en el cuerpo de bomberos, de personas intoxicadas por el fuerte olor a marihuana. Vecinos de la zona pide mayores controles a la hora de destruir este tipo de alcaloides.
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