Un video de una cámara de seguridad captó los momentos del ataque a bala que tiene consternados a los habitantes de ese sector del municipio.
El hecho sucedió el martes en horas de la tarde cuando los ocupantes de un vehículo negro se detienen en la 58CC.
La grabación hecha desde una cámara de seguridad instalada por los vecinos, para tratar de evitar una cadena de hurtos que sufrió una pequeña tienda de la zona, deja ver los movimientos del sicario.
Este, vestido con un jean, una camiseta oscura y una chaqueta blanca, se acercó al vehículo en el que estaban sus víctimas, se paró frente a la ventana del copiloto y después de que pasara un taxi desenfundó su arma y comenzó a disparar.
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Un niño que estaba sentado en la acera, al otro lado de la calle, salió espavorido, mientras los ocupantes intentaron huir de las balas.
La primera en hacerlo fue la mujer, que cayó tan pronto salió del auto. Detrás de ella, en milésimas de segundos, abandonó el vehículo su acompañante, quien miró cómo quedaba en el suelo y corrió hacia el norte.
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También se ve en el video, que por su crudeza Noticiascaracol.com se abstiene de publicar, cuando un perro de raza yorkshire terrier sale del automóvil.
Mientras eso ocurría, el sicario cercaba a las víctimas, se paraba frente a la mujer y accionaba su arma contra el joven, que huía en busca de salvar su vida.
El delincuente lo siguió, se puede ver en la grabación, mientras aparecen dos motocicletas en el video: una, sospechosamente, lo esperaba metros atrás del lugar de los hechos.
Mientras el ruido de las balas y los esfuerzos por respirar de la joven aún retumbaba en los oídos de los vecinos, el joven perseguido corría.
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Pero solo alcanzó a escabullirse hasta dos cuadras más adelante. En una de ellas fue interceptado y asesinado.
Minutos después arribaron los investigadores de la Unidad de Vida de la Sijín y la Fiscalía. Inspeccionaron los cadáveres y establecieron las identidades de las víctimas.
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Ella se llamaba Carolina Maria Zuluaga García, tenía 29 años. Él, Dahían Alexis Arbeláez Aguirre, tenía 23 años.
Le decían ‘Pucca’, era reconocido por ser un fanático de las motos, de las competencias acrobáticas en estos vehículos, a las que llaman ‘piketes’.