Aunque a mediados de abril y mayo Antioquia era ejemplo en el país por el manejo del COVID-19, ahora está a punto de declarar la alerta naranja por la ocupación en unidades de cuidados intensivos, que alcanza el 73 %.
De acuerdo con las autoridades, Medellín tiene 531 camas UCI, de las cuales 204 están en uso por pacientes con coronavirus: 116 son de personas remitidas desde los departamentos de Chocó, Atlántico, Tolima y Sucre y 88 son antioqueños.
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Además de la situación hospitalaria, el crecimiento acelerado de contagios y la muerte de 61 pacientes son otros detonantes. Solo en las últimas 24 horas se reportaron 474 nuevos casos y cuatro muertos .
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Ante este panorama, el gobernador encargado de Antioquia ya tiene un aproximado de cuándo se podría decretar la alerta naranja.
“Cada día tenemos más personas contagiadas y cada día, infortunadamente, tenemos más personas fallecidas. De acuerdo a esas proyecciones muy posiblemente se declare la alerta naranja la tercera o cuarta semana de julio”, advirtió Luis Fernando Suárez.
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Expertos indican que la solución para bajar la curva de contagio es volver al confinamiento total, lo que implicaría el cierre de algunos sectores económicos, como el comercio.