En el Bajo Cauca antioqueño
, 16 municipios permanecen confinados y desabastecidos por cuenta del paro minero que se adelanta en esa zona de Colombia. Entretanto, en el nordeste de Antioquia los pobladores advierten que están a merced de los grupos criminales.
Las autoridades pretenden seguir con las caravanas humanitarias para atender las urgencias de los habitantes. Además, se conoció que 420 militares reforzarán la seguridad en esos municipios.
Desde la Plaza de la Libertad de Medellín se realizó un plantón pacífico para rechazar los actos violentos que se han registrado en esa zona del país.
“Aproximadamente dos mil niños están sin recibir su ración del PAE. Los adultos mayores no están recibiendo sus apoyos, sus bonos solidarios. La mayor parte de la población de Vegachí tiene sus neveras vacías, están sin alimentos”, sostuvo Ulilo Acevedo, alcalde de Vegachí.
Seis hospitales no tienen oxígeno para sus pacientes. Las misiones médicas sienten temor tras los múltiples ataques que han recibido y más de 100.000 niños no han podido recibir clases.
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Ante los problemas de orden público de las últimas horas en Tarazá, donde fue incinerado un peaje, las autoridades han reforzado la seguridad.
Según Aníbal Gaviria, el gobernador de Antioquia, cada día incrementan los sobornos para que los habitantes participen de las acciones violentas.
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“Hay pagos de $80.000 hasta $300.000 para personas que hagan tareas como la quema de vehículos, como el atentado contra estaciones de Policía, como participación en manifestaciones, como la quema del peaje”, afirmó.
En las vías, soldados limpian las carreteras que fueron obstruidas. Los uniformados mantienen las operaciones para garantizar el transporte de carga.
Entretanto, en el departamento de Córdoba varios municipios superaron los embates del paro minero. La situación se empieza a normalizar en San José de Uré, Puerto Libertador, Montelíbano, La Apartada y Ayapel.
En esas zonas, luego de 12 días de bloqueo por el paro minero, los estudiantes volvieron a los colegios.
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“Nos harán falta algunos docentes que están afuera del municipio, pero tenemos la seguridad de que ya vamos a poder retornar a las actividades académicas”, aseguró Rafael Martínez, alcalde de Puerto Libertador.