El conductor de una ambulancia atropelló a un abuelito de 85 años en la localidad de Tunjuelito, en el sur de Bogotá, y lo dejó tirado pese a que varias personas que vieron el accidente, a plena luz del día, intentaron detenerlo.
“Eran las 9:35 de la mañana, lo atropelló una ambulancia cuando venía con lo del desayuno (…) No paró para haberlo auxiliado ni nada de eso”, contó María Robayo, esposa de Rodrigo Betancourt, la víctima.
“Cuando yo llegué él estaba tirado en el suelo”, dijo la indignada mujer.
Don Rodrigo sufrió lesiones “en la columna y una parte en la ceja”, reveló doña María.
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Los videos de seguridad que muestran cuando la ambulancia atropelló a un abuelito de 85 años mientras él se movilizaba en una bicicleta, llevaron a otros conductores a señalar que el vehículo, al parecer, pertenece a la empresa Saem.
La esposa de don Rodrigo dijo que desconocidos se acercaron a ella para ofrecerle ayuda a cambio de que no denunciara.
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“Que ellos prestaban un carro para el servicio de la hora que yo saliera de la clínica y que prestaban la ambulancia las 24 horas, pero que no fuera a denunciarlos a ellos sino al muchacho que ocasionó el accidente, pero que a la empresa no”, sostuvo.
Para doña María, el conductor de la ambulancia que le causó ese daño a su esposo “no se merece trabajar en lo de la salud”.