Alerta por cierre de servicios pediátricos en Colombia: “No tenemos recursos”

Hay preocupación en el sector de la salud por el cierre continuo de servicios pediátricos y de ginecoobstetricia en varios centros médicos en Colombia. En la última semana, diferentes centros de salud como la Clínica Farallones en la ciudad de Cali y el Hospital Infantil Concejo de Medellín tuvieron el cierre de camas y servicios de operación para recién nacidos y niños.

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"La recomendación de la Organización Mundial de la Salud es que debe haber entre 3.5 y 3.7 camas de pediatría por cada 1.000 habitantes y en Colombia no se alcanza ni siquiera la mitad de este número. A pesar de esta cifra, se han venido cerrando sistemáticamente camas, que se ha exacerbado en los últimos cuatro o cinco años", explicó Diocel Lancheros, presidente del Sindicato Nacional de Pediatras.

La reducción en las camas y en los servicios de pediatría pone en alerta a los médicos por las afectaciones a pacientes que pondrían en jaque los ritmos de atención en las clínicas y hospitales.

"Aumenta aún más la carga sobre las unidades de atención general, lo que podría afectar negativamente la calidad de la atención proporcionada", informó el infectólogo pediatra Juan Pablo Rojas.

El gremio de médicos asegura que la situación no es nueva, pero que se ha agudizado en los últimos años, especialmente en el último mes se ha registrado el cierre de siete servicios pediátricos y seis de ginecoobstetricia.

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Clemencia Mayorga, presidenta del Colegio Médico de Cundinamarca y Bogotá, indicó que este panorama se da porque "la mayoría de enfermedades que atendemos los pediatras en niños hospitalizados están entre enfermedades respiratorias, gastrointestinales y de infección urinaria y esas son patologías que requieren poco uso de insumos y medicamentos”.

Para el director de Unipis Colombia, Jorge Toro, “es preocupante que tengamos que cerrar camas pediátricas en el país por un tema de costos (...) No tenemos recursos las IPS para poder atender estos servicios”.

Piden que el cierre continuo de estos servicios frene definitivamente. Por ello, han radicado un derecho de petición al Ministerio de Salud, a la Supersalud y a la Procuraduría para que se tomen las medidas pertinentes y se garantice la permanencia de los médicos pediatras y de la atención oportuna.

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