Pedro Emilio Acosta Ávila fue el hombre que asesinó con extrema violencia a Vanessa Masmela Soto, de 22 años, a quien le propinó 12 puñaladas por robarle sus pertenencias y falleció. Fue declarado un peligro para la sociedad por la juez que dictó su condena, subrayando la importancia del respeto a la vida en Colombia.
Un crimen atroz que sacudió a Bogotá
El 25 de mayo, Vanessa Masmela Soto caminaba por la localidad de Barrios Unidos, en Bogotá, cuando fue brutalmente atacada por Pedro Emilio Acosta Ávila, quien le quitó la vida para robarle su celular. Las cámaras de seguridad captaron el momento en que Acosta la agredió con extrema violencia, un hecho que conmocionó a la comunidad y llamó la atención de las autoridades. Durante la audiencia, se reveló que Vanessa sufrió casi doce puñaladas, un detalle que impactó profundamente a su familia y a los presentes.
La decisión de la juez: una condena por sevicia
La juez 54 penal con función de garantías fue contundente en su fallo, destacando la crueldad con la que Acosta cometió el crimen y la necesidad de proteger a la sociedad de individuos peligrosos.
"Debemos respetar aquí los derechos ajenos porque aquí en Colombia sí, nosotros tenemos que respetar, no sé si en otras partes, pero yo creo que en todas partes debemos respetar y más la vida de las personas, porque nadie es dueño de la vida de otro ser humano", afirmó la juez al justificar la decisión de enviar a Acosta a prisión.
Reacciones de la familia: indignación y dolor
La prima de la víctima, Nicoleth Masmela, expresó su indignación y dolor al ver la actitud de Acosta durante la audiencia. "La verdad me parece que es una falta de respeto. O sea, declararse uno inocente con todas las pruebas que lo apuntan, con videos, con testimonios, con pruebas y declararse inocente. No solo se declaró inocente, fue una falta de respeto, como estaba en la audiencia, simplemente acostado como si no le importara. No le importó la vida de mi prima y tras del hecho se ríe", comentó con evidente frustración.
Un historial delictivo y un intento de evadir la justicia
Sergio Calderón, representante de las víctimas, señaló que Acosta ya tenía antecedentes por hurto y porte ilegal de armas, y que intentó identificarse con datos erróneos para evitar ser procesado. "Es importante tener en cuenta en este caso que el procesado ya tenía antecedentes. No es muy normal que los extranjeros se identifiquen de otra manera con el fin de no ser procesados y de que no se le pueda ver el historial delictivo que tienen previamente a los hechos", explicó Calderón. Esta conducta reafirmó la decisión de la juez de mantener a Acosta tras las rejas, reconociendo el peligro que representa para la sociedad.