Una joven de 20 años acabó con quemaduras de tercer grado en sus manos y cuello tras una sesión de bronceado de 5 minutos.

De acuerdo con el Daily Mail, Chloe Douglas se fue a broncear en la noche y a la mañana siguiente se levantó con un fuerte sarpullido en sus manos y cuello.

Con el paso de las horas, el sarpullido se convirtió en desagradables ampollas, por lo cual debió acudir a un centro médico para ser evaluada.

Aunque al principio pensó que las quemaduras podrían haber sido causadas por la exposición a la cama de bronceado, acabó sorprendida por la verdadera razón detrás de las heridas.

Los médicos creen que la causa posible de esta reacción fue la interacción previa con un perejil gigante, una planta invasora que puede causar graves quemaduras cuando la zona afectada se expone a la luz.

"La recuperación fue extremadamente dolorosa. Tuve que tomarme unos días de descanso simplemente por sentirme realmente mal después de recibir tratamiento", comentó la joven camarera.

Aunque las ampollas ha desaparecido, quedará con cicatrices en la zona afectada, por lo cual hizo un llamado al autocuidado.

"Asegúrate de lavarte las manos constantemente y usar crema solar", expresó.

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