Hasta ahora no existe evidencia de que haya mayor riesgo de contraer COVID-19 por estar embarazada. Sin embargo, no se confíe y asuma medidas de protección.
Frente a la lactancia, la Organización Mundial de la Salud ha señalado que no debe interrumpirse, pero sí es mejor que las madres usen tapabocas mientras lo hacen.
Mujeres con coronavirus también pueden dar pecho a su bebé, siempre y cuando se tomen todas las medidas sanitarias. No es cierto que se puede contagiar al menor a través de la leche materna.
“La forma de hacerlo sería lavarse las manos, usar tapabocas quirúrgico, lavado de manos, limpieza en el área del pezón y poner a lactar al bebé normal. Al terminar, hacer baño tibio con el hijo y otra vez la madre debe lavarse las manos y continuar con su tapabocas”, explica Ricardo Rueda Sáenz, jefe de medicina reproductiva de la Fundación Santa Fe.
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Ahora, no todo es malo, el aislamiento preventivo obligatorio trajo una ventaja única para la llegada de los nuevos integrantes de la familia.
“El confinamiento facilita estar a solas con el bebé recién nacido. Pasa que sin confinamiento es difícil para la familia tener intimidad y privacidad. En este momento no hay visitas y eso facilita todas las operaciones realizadas en el interior de la casa”, señaló Carolina Borja, psiquiatra prenatal.
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Algunas consultas podrán hacerse de manera virtual, pero recuerde que lo importante es no perder contacto con el programa de control prenatal o el de crecimiento y desarrollo, una vez nace el bebé.