El ataúd donde están los restos mortales de la reina Isabel II, quien murió el jueves 8 de septiembre de 2022, fue construido hace más de 30 años, según una entrevista que dio la empresa funeraria Leverton and Sons, encargada de las honras fúnebres de la familia real.
Hace un par de años, la funeraria le explicó a The Times que era un completo misterio cuándo y quién había fabricado los ataúdes de la reina y del príncipe Felipe, los cuales cuentan con las mismas características.
Les entregaron los ataúdes en 1991, luego de que empezaran a trabajar como proveedores de la monarquía.
Andrew Leverton, entonces directivo de Leverton and Sons, mencionó que los féretros están hechos de roble inglés y revestidos de plomo, para que sean herméticos, pues deben ser depositados en una cripta.
También cuenta con asas de latón que tienen diseños especiales que son usados solo para la monarquía.
Los expertos afirmaron que el plomo en los ataúdes de Isabel II y de Felipe los hace sumamente pesados para las ocho personas que deben cargarlo.
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