En un barrio de Argentina ocurrió un hecho que se volvió viral en las redes sociales: un ladrón aprovechó que otro estaba esposado en el suelo, para robarle las zapatillas. La insólita situación quedó registrada en video.
Precisamente, en las imágenes se aprecia el momento en el que un ladrón está tirado bocabajo en un andén, con unas esposas puestas y un policía que lo custodia.
Segundos después, otro ladrón llega por detrás y le quita, una por una, las zapatillas. Pese a que el oficial intentó persuadir al segundo delincuente, este se dio a la fuga con el botín en las manos.
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Según lo revelado por Crónica , este hecho ocurrió en el barrio Constitución de Buenos Aires, capital de Argentina.
El hurto ocurre justo cuando el policía le pide el teléfono celular a un ciudadano que transitaba por la zona para pedir más apoyo.
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“Pará, pará”, le dice el uniformado al otro delincuente, que cometió el robo a sus espaldas.
“Qué hermoso país”, “Vio una oportunidad y la aprovechó”, “100 años de perdón, es un genio”, “Argentina, un país con buena gente”, “Qué vergüenza”, “Increíble” y “Se tenía que hacer y se hizo” fueron algunos de los comentarios que dejaron los usuarios de las redes sociales en la publicación.
Por el momento se desconocen más datos de esta situación.
Argentina, un lugar. pic.twitter.com/0EuQSJQUF2
— Manuel Adorni (@madorni) February 21, 2023
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Un paramédico de la Cruz Roja protagonizó un deplorable hecho cuando atendía el caso de una paciente muerta en Tijuana, en el estado Baja California, en México. Una cámara de seguridad captó cómo robó en la casa de la víctima que atendía.
El hecho ocurrió el pasado 11 de febrero, pero la denuncia se hizo pública hasta ahora.
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Las imágenes muestran cómo el paramédico aguardó a que su compañero saliera del inmueble en el que falleció la mujer para cometer el ilícito.
Cuando se vio solo, se aproximó al bolso de la occisa, que había sido dejado en la sala de la casa, tomó el dinero, lo envolvió en unos guantes y los guardó en el bolsillo del pantalón. Hizo todo sin titubear junto al cuerpo de la paciente, que permanecía sentada al lado de la mesa del comedor.
El paramédico de la Cruz Roja tomó después un papel, al parecer un documento relacionado con el levantamiento del cadáver, y salió a buscar a su colega para entregárselo, fingiendo que nada pasó.